La sombra de Breznev

., Este Bor¨ªs Yeltsin se parece cada vez m¨¢s al Leonid Breznev conservado poco menos que en formol durante a?os o a sus sucesores Yuri Andropov y Konstant¨ªn Chernenko, cuyos mandatos como m¨¢ximos l¨ªderes sovi¨¦ticos estuvieron marcados por la enfermedad.

Sin embargo, la agencia Interfax, cuyo anterior director es hoy vicejefe de la Administraci¨®n presidencial, ha interrogado a varios polit¨®logos, una especie que abunda en Rusia como en ninguna parte, y de las respuestas de varios de ellos se deduce que la mala salud de los l¨ªderes mundiales no es siempre motivo ni para que ¨¦stos dimitan ni para que el pa¨ªs caiga en la inestabilidad.

Un ejemplo: ?gor Bunin, director del Centro de Tecnolog¨ªas Pol¨ªticas, asegura que Franklin Roosevelt, pese a su par¨¢lisis cerebral, hizo que su pa¨ªs superase la Gran Depresi¨®n y ganase la II Guerra Mundial. El mismo experto recuerda que, pese a que en 1993 se agrav¨® el c¨¢ncer de pr¨®stata que sufr¨ªa Mitterrand, su pa¨ªs mantuvo una situaci¨®n pol¨ªtica interna estable y una l¨ªnea exterior independiente.

V¨ªktor Kremeniuk, vicedirector del Instituto de EEUU y Canad¨¢ de la Academia de Ciencias, recuerda que Ronald Reagan padeci¨® Alzheimer, tuvo dos tumores y dos heridas de bala, olvidaba cosas, no pod¨ªa concentrarse y confund¨ªa Brasil con Bolivia en p¨²blico. "Pese a ello", se?ala, "no creo que los norteamericanos olviden que con ¨¦l se super¨® la crisis de 1979-1981 y termin¨® la guerra fr¨ªa".

Viacheslav Nikonov, presidente de la Fundaci¨®n Pol¨ªtica, sostiene que "s¨®lo un pa¨ªs con ramas de poder bien desarrolladas, adem¨¢s de la presidencial, puede permitirse tener un jefe del Estado con graves problemas de salud", algo que ocurr¨ªa en tiempos de Breznev o de Lenin, pero no en la Rusia actual.