La Ertzaintza acusa a un empleado de la muerte del industrial de Lasarte

Un d¨ªa despu¨¦s de localizar el cad¨¢ver del empresario de Lasarte Patxi Alonso Pino escondido en una zona boscosa del monte Ul¨ªa, en San Sebasti¨¢n, la Ertzaintza detuvo el viernes a dos j¨®venes acusados de participar en el homicidio del industrial, desaparecido a principios de septiembre. Uno de los arrestados, identificado por la polic¨ªa con las iniciales A.R.R., de 22 a?os, vecino de Lasarte, es el empleado de la empresa de gr¨²as propiedad de la v¨ªctima y tiene antecedentes por delitos de robo. El otro joven es amigo suyo.

Agentes de la Ertzaintza, auxiliados por perros especializados, localizaron el jueves sobre las 18.30 el cad¨¢ver de Patxi Alonso Pino enterrado en un paraje apartado del monte Ul¨ªa, dentro del t¨¦rmino municipal de San Sebasti¨¢n. Los familiares del empresario, propietario de una empresa de gr¨²as de transporte de veh¨ªculos, de 45 a?os, hab¨ªa denunciado su desaparici¨®n el 2 de septiembre. La autopsia determino que Alonso Pino hab¨ªa recibido el impacto de dos tiros de escopeta. Tras ser confirmada la identidad del cad¨¢ver, el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de San Sebasti¨¢n orden¨® a la polic¨ªa la detenci¨®n de las dos personas sospechosas de estar relacionadas con la muerte del empresario. Los dos acusados, el empleado de la empresa de gr¨²as A.A.R., y un amigo suyo, vecino de San Sebasti¨¢n de 30 a?os, fueron arrestados a primeras horas de la tarde del viernes, acusados de ser autores de un presunto delito de homicidio. Desde el principio la Ertzaintza hab¨ªa centrado sus investigaciones sobre el empleado de la v¨ªctima, ya que hab¨ªa comprobado que hab¨ªa utilizado una de las tarjetas del empresario el mismo d¨ªa de la desaparici¨®n de Alonso Pino para abonar cuentas por valor de 200.000 pesetas en un club de alterne. Control de llamadas A partir de este dato, los responsables de la investigaci¨®n controlaron llamadas telef¨®nicas y movimientos de A.A.R y su amigo. El principal sospechoso, sin embargo, estaba protegido por la coartada de haber sido la primera persona que advirti¨® la desaparici¨®n de la v¨ªctima. A.A.R. avis¨® el 1 de septiembre de que Alonso Pino hab¨ªa dejado su cami¨®n, abierto y con las llaves puestas, aparcado frente al taller del pol¨ªgono Eziago, de Hernani, donde tiene su sede la empresa de gr¨²as. En el interior de la nave, la v¨ªctima hab¨ªa dejado el ordenador encendido y el tabaco encima de la mesa. Alonso Pino era viudo y padre de dos hijos, de 13 y 15 a?os. Su esposa falleci¨® hace dos a?os en la riada que arrastr¨® un camping en Biescas (Huesca), en la que ¨¦l tambi¨¦n result¨® herido de gravedad. El paso del tiempo sin noticias sobre el paradero del industrial hab¨ªa hecho perder a su familia las esperanzas de hallarle con vida. Sus allegados descartaron desde el primer momento la hip¨®tesis de que la desaparici¨®n de Alonso Pino se debiera a un secuestro o a un suicidio y se inclinaron por un homicidio por motivos econ¨®micos. Los submarinistas de la polic¨ªa aut¨®noma rastrearon el tramo del r¨ªo Urumea cercano al pol¨ªgono industrial donde se encuentra el taller de la v¨ªctima. Posteriormente, un grupo de familiares y amigos del fallecido se sumaron sin ¨¦xito a las labores de b¨²squeda en los montes de la zona, hasta que hace dos semanas el testimonio de un confidente permiti¨® localizar el cad¨¢ver. Los dos detenidos pasar¨¢n ma?ana a disposici¨®n judicial.