Se le cal¨®
Se le cal¨® el motor. Como a un principiante en un sem¨¢foro cuesta arriba. Habr¨¢ l¨¢grimas entre los tifosi de Ferrari. El h¨¦roe en el que hab¨ªan puesto sus esperanzas, al final, pesta?e¨®. Probablemente estaba escrito. Los dioses tambi¨¦n cometen errores. Incluso Schumacher puede hacerlo cuando siente la presi¨®n del momento decisivo. La cara de p¨®quer de Jean Todt, el general franc¨¦s del equipo rojo, lo dec¨ªa todo. La maldici¨®n que persigue al equipo italiano desde hace dos d¨¦cadas volvi¨® a mostrarse insuperable. No se puede luchar contra el destino.Ha sido un finland¨¦s parco en gestos y palabras, tal vez porque visit¨® a la muerte y volvi¨® para contarlo -estuvo m¨¢s de un mes en coma tras un accidente-, quien se ha proclamado campe¨®n del mundo. A lo grande, ganando la ¨²ltima carrera. No es, probablemente, el mejor piloto ni exhibe el carisma que se les presupone a quienes alcanzan la cima sin mirar atr¨¢s. Mika Hakkinen recuerda vagamente a su compatriota Keke Rosberg, tambi¨¦n campe¨®n del mundo a principios de la d¨¦cada pasada, que se hizo con el triunfo ganando un solo gran premio en un a?o. Un tipo s¨®lido, tenaz y humilde; en las ant¨ªpodas del altivo guerrero teut¨®n.
Mitolog¨ªas aparte, lo sucedido ayer en Jap¨®n era lo m¨¢s previsible. El campeonato se gana desde el principio. Y el dominio de McLaren Mercedes durante el primer tercio de la temporada fue insultante. S¨®lo un genio como Schumacher pod¨ªa entrometerse como lo hizo. Con una sola excepci¨®n, McLaren Mercedes y Ferrari se han repartido todos los grandes premios. Para Ron Dennis, el patr¨®n de la marca brit¨¢nica, supone una reivindicaci¨®n de su categor¨ªa, despu¨¦s de atravesar el desierto y ser menospreciado por sus colegas. Para la marca de la estrella de tres puntas es un ¨¦xito total; un sue?o. El bar¨®n Wolfgang von Tripp podr¨¢ descansar tranquilo, las flechas de plata han conseguido la gloria que ¨¦l no pudo proporcionarles, muerto a finales de los cincuenta en un tr¨¢gico accidente cuando emerg¨ªa como la estrella del automovilismo en un tiempo en el que se codeaba con personajes de la talla de Fangio y Stirling Moss. Paradojas de la vida, el derrotado ha sido su sucesor, probablemente el mejor piloto alem¨¢n de todos los tiempos.
Habitualmente, la clasificaci¨®n del ¨²ltimo gran premio de la temporada vaticina el comienzo de la siguiente. El a?o pasado fueron los McLaren-Mercedes los que apuntaron la que iba a ser su consagraci¨®n. Ayer, entre los seis primeros est¨¢ el tapado del pr¨®ximo a?o, el equipo Jordan, el ¨²nico que se ha entrometido en la pelea entre McLaren y Ferrari y en el que no se ha podido quedar Pedro Mart¨ªnez de la Rosa. Y est¨¢ tambi¨¦n Williams, con Harald Frentzen, que la temporada pr¨®xima pilotar¨¢ el b¨®lido destinado a nuestro h¨¦roe local. Adem¨¢s, con Goodyear fuera de la competici¨®n, el campeonato ser¨¢ un mon¨®logo de los neum¨¢ticos japoneses Bridgestone, que han triunfado en su segunda temporada. El calzado ya no marcar¨¢ las diferencias, lo que promete un campeonato abierto. Pero siempre nos quedar¨¢ Ferrari para so?ar que la poes¨ªa es viable, incluso en la galaxia de la alta tecnolog¨ªa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.