Seguridad en los centros comerciales

El 24 de febrero de este a?o sufr¨ª un fuerte golpe en el cuello y hombro derecho mientras realizaba mis compras en el centro comercial de Alcampo en Moratalaz, pues un comprobador de precios se desprendi¨® del soporte sobre el que se encontraba sujeto sin que por mi parte mediara manipulaci¨®n alguna sobre el citado comprobador. A consecuencia de dicho golpe permanec¨ª un mes de baja y se me pronostic¨® una contusi¨®n cervical y traumatismo en la zona afectada.El juez desestim¨® la denuncia por responsabilidad civil que present¨¦ y me exhort¨® a que el caso se resolviese mediante una responsabilidad civil compartida. Despu¨¦s de varios meses, Alcampo tambi¨¦n se neg¨® a admitir esta nueva posibilidad; esgrimi¨® el informe positivo que emitieron dos empresas a las que encarg¨® realizar un peritaje de sus instalaciones.

Lo m¨¢s grave de este escabroso asunto no est¨¢ relacionado con la cuant¨ªa econ¨®mica de la indemnizaci¨®n, que Alcampo siempre se ha negado a pagar para resarcirme de los indudables da?os que he recibido, sino que tiene que ver con la seguridad en las instalaciones de este centro comercial, pues aunque ellos han querido lavarse las manos presentando dos informes favorables de las mismas, lo que no dicen es que el d¨ªa que ocurri¨® el accidente estuvieran en perfecto estado, porque, de haber sido as¨ª, a m¨ª no se me habr¨ªa ca¨ªdo encima el comprobador. Muchas veces he pensado que, si en vez de a una persona adulta como yo, hubiese sido un ni?o el receptor del golpe, las consecuencias habr¨ªan sido mayores, si no irreparables. Me imagino que entonces s¨ª se hubiesen adoptado las medidas necesarias.-