Un diario chileno asegura que el Ej¨¦rcito se halla en estado de alerta

Fuentes del Ej¨¦rcito chileno desmintieron oficialmente ayer las versiones de un acuartelamiento de la tropa y dijeron que hay completa normalidad en respuesta a una informaci¨®n del diario La Tercera, que citaba fuentes castrenses, seg¨²n las cuales los militares se hallan en estado de alerta: no pueden alejarse m¨¢s de 40 kil¨®metros de sus guarniciones, deben estar a disposici¨®n de sus unidades y la guardia de ¨¦stas se refuerza. Seg¨²n el diario, la medida es "el corolario de una serie de se?ales que la instituci¨®n ha enviado" para manifestar su preocupaci¨®n por la suerte de Augusto Pinochet. El Gobierno guarda silencio ante la versi¨®n. Un senador socialista la confirm¨®, pero parlamentarios de distintos partidos le restaron credibilidad y todos coinciden en descartar que est¨¦ en peligro la estabilidad democr¨¢tica.Los jefes de las Fuerzas Armadas, que se reunieron el viernes, desean que cuanto antes sea convocado el Consejo de Seguridad Nacional para tratar la situaci¨®n de Pinochet. Adem¨¢s de lograr que el canciller, Jos¨¦ Miguel Insulza, viaje a Londres, la derecha y los militares presionan soterradamente para que se discuta la posibilidad de un Gobierno de unidad nacional, del que se excluir¨ªa a los socialistas por su apoyo a la extradici¨®n de Pinochet.

"La democracia de Chile se ha visto da?ada por la acci¨®n contra m¨ª", afirma por su parte Pinochet en una carta al semanario brit¨¢nico The Sunday Times. Tambi¨¦n dice haber perdido su fe en el Reino Unido. "Espa?a super¨® los a?os de Franco sin recriminaciones. ?Por qu¨¦ quieren que nosotros no hagamos lo mismo?". Su carta contribuy¨® a la tensi¨®n en Chile. Parlamentarios le critican por no haber pedido perd¨®n y le acusan de "hip¨®crita" por afirmar que le habr¨ªa gustado que el presidente Salvador Allende aceptara la dimisi¨®n y las garant¨ªas que le ofreci¨® durante el asalto a La Moneda en 1973. En una grabaci¨®n clandestina, Pinochet lleg¨® a decir que a Allende hab¨ªa que arrojarlo en vuelo del avi¨®n que le ofrecieron las Fuerzas Armadas.