Nadal, "preocupado" y cauto tras conocer la presentaci¨®n de un segundo suplicatorio

"Es un tema que me preocupa pero no me ocupa". As¨ª de cauto se mostr¨® ayer el alcalde de Tarragona y diputado al Congreso, Joan Miquel Nadal, a la hora de analizar la decisi¨®n del Tribunal Supremo de solicitar un segundo suplicatorio contra su persona por los presuntos delitos de tr¨¢fico de influencias y prevaricaci¨®n. Fuentes del Congreso informaron ayer de que la votaci¨®n del suplicatorio de Nadal podr¨ªa demorarse hasta el pr¨®ximo mes de febrero debido a que enero es inh¨¢bil en la c¨¢mara legislativa.

Joan Miquel Nadal compareci¨® ayer ante los medios de comunicaci¨®n tras una visita a las obras del futuro Palacio de Congresos de Tarragona, obra que se inaugurar¨¢ en mayo del pr¨®ximo a?o. El alcalde convergente no quiso responder a ninguna pregunta relacionada con la petici¨®n de un nuevo suplicatorio y ante la insistencia de los periodistas se limit¨® a declarar: "Es un asunto que me preocupa, pero no me ocupa. Estoy muy tranquilo. Gracias por su amabilidad, comprensi¨®n y tolerancia". Este segundo suplicatorio se refiere al trato de favor que supuestamente se dispens¨® desde el Ayuntamiento de Tarragona a la promoci¨®n de unos chalets adosados construidos en la poblaci¨®n de Els Pallaresos por parte de la sociedad Citeco, empresa de la que formaba parte como accionista la esposa del alcalde, Julia Abad. Aunque el grupo municipal de Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) y el propio alcalde ya se esperaban una resoluci¨®n de este tipo por parte del Tribunal Supremo, la solicitud del suplicatorio cay¨® como un jarro de agua fr¨ªa en el Ayuntamiento de Tarragona, principalmente porque la votaci¨®n en el Congreso sobre si le retira o no la inmunidad parlamentaria a Nadal se retrasar¨¢ muy probablemente hasta el pr¨®ximo mes de febrero. De este modo, la votaci¨®n coincidir¨ªa de pleno con la ¨¦poca electoral si finalmente las elecciones auton¨®micas se adelantaran al pr¨®ximo mes de marzo. Por el momento, Joan Miquel Nadal se perfila como cabeza de lista de Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) al Parlament por la provincia de Tarragona. Fuentes de Converg¨¨ncia no quisieron comentar ayer si la retirada de la inmunidad parlamentaria podr¨ªa dificultar el acceso del alcalde de Tarragona a la candidatura auton¨®mica. Adem¨¢s, el auto del Supremo tambi¨¦n sorprendi¨® porque en este texto se afirma que Joan Miquel Nadal aprob¨® el proyecto urban¨ªstico en el que participaba la empresa de su esposa, cuando en verdad ¨¦ste se construy¨® en el t¨¦rmino municipal de Els Pallaresos y, en consecuencia, fue el Ayuntamiento de aquella poblaci¨®n el que dio el visto bueno a la construcci¨®n de los chalets. La investigaci¨®n del Tribunal Supremo tratar¨¢ de dilucidar si el alcalde y diputado por CiU, Joan Miquel Nadal, benefici¨® de alguna forma a la urbanizaci¨®n promovida por su esposa. Este peri¨®dico ha tenido acceso al expediente administrativo municipal y en ning¨²n documento aparece la firma del alcalde. Los hechos se remontan a 1985, cuando el Ayuntamiento de Els Pallaresos pidi¨® al de Tarragona poder conectarse a su red de alcantarillado debido a la proliferaci¨®n de urbanizaciones en su t¨¦rmino municipal. El gobierno municipal socialista de la ¨¦poca le concedi¨® la autorizaci¨®n. Contraprestaci¨®n Sin embargo, en 1992 Els Pallaresos pidi¨® una ampliaci¨®n de caudal porque se hab¨ªan construido tres urbanizaciones m¨¢s, entre ellas la de la esposa del alcalde. Los t¨¦cnicos del consistorio tarraconense supeditaron su aprobaci¨®n a la firma de un convenio de contraprestaci¨®n de servicios entre los dos ayuntamientos. Este convenio no se aprob¨® hasta noviembre de 1996. Seg¨²n el informe de la fiscal, Mar¨ªa Jos¨¦ Osuna, gracias a la conexi¨®n con la red de Tarragona, la constructora Citeco se ahorr¨® instalar una depuradora o asumir obras m¨¢s costosas. Por su parte, el Ayuntamiento de Tarragona argumenta que la firma del convenio se retras¨® debido a su complejidad y a la celebraci¨®n durante aquel periodo de las elecciones municipales de 1995, lo que paraliza la vida municipal. Adem¨¢s, el convenio fue aprobado por unanimidad en un pleno del que se ausent¨® Joan Miquel Nadal.