"La Academia no cambia las cosas por capricho"

Henrike Kn?rr, catedr¨¢tico de Filolog¨ªa Vasca y vicepresidente de Euskatzaindia, es el responsable de la Comisi¨®n de Onom¨¢stica de la Academia, que atiende las cuestiones de toponimia. Dice que "nada se gana envenenando el ambiente", como a su juicio han hecho algunos en este caso, con cr¨ªticas que considera poco fundadas a las decisiones de Euskaltzaindia, que respeta tanto la toponimia vasca como la castellana. Pregunta. Esta de Cantabria-Tolo?o no ha sido la primera pol¨¦mica sobre toponimia en que se ve inmersa la Academia (recu¨¦rdese la de Nervi¨®n-Ibaizabal). ?A qu¨¦ viene esta fruici¨®n por cambiar de nombres de lugares? Respuesta. Nadie ha cambiado nada. En el caso del nombre de la sierra, la Academia ha propuesto mantener la denominaci¨®n Tolo?o porque hay un empleo atestiguado desde hace siglos, que en gran parte est¨¢ vivo. Pero Euskaltzaindia no ha dicho que se destierre el nombre de sierra de Cantabria, sino que es preferible emplear el de sierra de Tolo?o. Es deber de todos guardar la fidelidad de los nombres. Por esa misma raz¨®n, si los estudios prueban un error, corresponde a los poderes p¨²blicos, previo dictamen acad¨¦mico, que se corrija. Por lo que toca a Nervi¨®n-Ibaizabal, las cosas son todav¨ªa m¨¢s evidentes. Ibaizabal es el nombre de la r¨ªa de Bilbao (ambos son leg¨ªtimos), y buena parte de los bilba¨ªnos actuales as¨ª lo siguen diciendo. Es una tremenda majader¨ªa decir que Nervi¨®n es el nombre de siempre. P. ?No tiene algo de imposici¨®n fijar denominaciones de pueblos que muchas veces no son aceptadas ni por sus habitantes? R. Puede haber personas que manifiesten disconformidad hacia el proceso de normalizaci¨®n. Pero en este punto, hay que respetar la ley, y ¨¦sta manda que los nombres vascos deben recibir graf¨ªa vasca, y los castellanos graf¨ªa castellana. De este modo lo correcto es escribir Murgia o Lekeitio, de un lado, y Fontecha y Cortes (no Fontetxa ni Kortes). P. ?Qu¨¦ potestad tiene Euskaltzaindia para variar las denominaciones de lugares en la cartograf¨ªa oficial? R. En general, los poderes p¨²blicos, en sus diversos niveles, acatan los dict¨¢menes de la Academia, y, a su vez, los cart¨®grafos siguen ese camino. Pero otras veces no es as¨ª. Se ha puesto, por ejemplo, Eskuernaga [a la localidad de Villabuena, en la Rioja Alavesa], en contra de nuestro dictamen. P. ?En el caso de Cantabria-Tolo?o, ?cu¨¢l es la raz¨®n de tanta pol¨¦mica? R. Muchos creen que el nombre de la sierra es Cantabria. En parte, por cierto, la culpa la tienen los monta?eros que, con la mejor buena voluntad, han propagado algunos nombres incorrectos. Ah¨ª tenemos el nombre del monte navarro Beriain, mal llamado San Donato. Y Larrunarri es Larrunarri, no Txindoki. Est¨¢ a punto de publicarse, en la revista Euskera, un trabajo muy documentado de Juan San Mart¨ªn, contra la extensi¨®n impropia de Txingudi, a lo que siempre se ha llamado y se llama Bidasoa. Me gustar¨ªa saber por qu¨¦ se ha armado tanto l¨ªo con lo de Tolo?o-Cantabria. Por cierto, Euskaltzaindia se ha enterado por la prensa del escrito que se ha hecho correr en la zona en contra de algunas personas y asociaciones.