La "fascinaci¨®n" por la ciencia en Espa?a

La Fundaci¨®n Arte y Tecnolog¨ªa y la Residencia de Estudiantes han organizado exposiciones para mostrar el desarrollo cient¨ªfico como factor de cambio en la Espa?a del siglo XX, desde la referencia del centenario del 98. Los comisarios, Jos¨¦ Manuel S¨¢nchez Ron y Antonio Lafuente, historiadores de la ciencia y f¨ªsicos, han investigado las im¨¢genes de los contenidos cient¨ªficos en diversos campos y su influencia en la sociedad, donde se recibe "con fascinaci¨®n". Ayer se inaugur¨® la muestra de la fundaci¨®n de la Telef¨®nica (calle de Fuencarral, 3), con 150 fotograf¨ªas y v¨ªdeos.

Unos postes de la luz llevan entre sus cables grandes reproducciones de la presa del Pont¨®n de la Oliva, en una foto de Clifford de 1858, la sala de m¨¢quinas de la Exposici¨®n General Catalana, en la Barcelona de 1871, la instalaci¨®n del servicio telef¨®nico autom¨¢tico en Madrid (1926), un dique en El Ferrol, de 1879, y una l¨ªnea de los ferrocarriles de Asturias, Galicia y Le¨®n de 1884. La exposici¨®n Im¨¢genes de la ciencia en la Espa?a contempor¨¢nea, abierta en la Fundaci¨®n Arte y Tecnolog¨ªa hasta el 24 de enero, contiene 150 fotograf¨ªas y v¨ªdeos entre una revisi¨®n de 3.000 im¨¢genes que Antonio Lafuente ha investigado en diversos centros, sobre todo en el Archivo General de la Administraci¨®n (AGA), la Biblioteca Nacional y la Filmoteca Espa?ola.En el montaje, que comienza con un almac¨¦n de materiales, con libros, documentos y objetos, como una met¨¢fora del trabajo de los historiadores, seg¨²n el comisario, la escenograf¨ªa separa las ocho secciones en que se divide el contenido, junto a la dispersi¨®n de monitores donde se exhiben 24 piezas audiovisuales. Hay reportajes, con abundante material de No-Do y presencia de Franco, y documentales sobre aspectos de Juan de la Cierva, Torres Quevedo, Mara?¨®n, Severo Ochoa, Barraquer, junto a otros temas como el plan Badajoz, la mujer en la guerra, un concurso de beb¨¦s, el invento del chaleco calefactor, la cruzada de protecci¨®n de los ojos y la fabricaci¨®n de m¨¢scaras antig¨¢s.

Confianza

Antonio Lafuente declar¨® ayer que la exposici¨®n refleja "la fascinaci¨®n y la seducci¨®n que tiene la ciencia entre la poblaci¨®n, con la creencia de que es capaz de resolver todos los males y el progreso en el hecho t¨¦cnico". A?ade que no se han ocultado las relaciones de los cient¨ªficos con el poder y la ciencia como arma pol¨ªtica y propaganda. "Los cient¨ªficos son los nuevos h¨¦roes populares, y de ello son conscientes Cajal, Einstein o Marconi. Costa dec¨ªa que regar era gobernar y entend¨ªa la ciencia como motor de cambio, pero durante el franquismo el lema se convirti¨® en "gobernar es regar" y la t¨¦cnica se utiliz¨® para legitimar el r¨¦gimen".Junto a la ciencia como progreso, como mito y como amenaza -la guerra en un hospital de campa?a realizado con sacos terreros-, el recorrido sigue por las conquistas de la t¨¦cnica en la vida cotidiana, como la luz, el tel¨¦fono, la radio, la higiene y las vacunaciones. La evoluci¨®n, desde la autarqu¨ªa hasta el desarrollismo, aparece en las im¨¢genes de las inauguraciones que celebra el poder y los cursos populares de higiene. Tambi¨¦n figuran los inventos, "un reflejo del genio nacional", como unas banderillas que evitan herir al torero o un chaleco calefactor unido al tubo de escape, presentados "con el serm¨®n laico del No-Do", seg¨²n el comisario.

La muestra, que arranca con el Desastre del 98, se termina en 1968, "un s¨ªmbolo para Europa, donde hay una gran impugnaci¨®n a la cultura oficial". Las im¨¢genes son de manifestaciones de estudiantes con grises y Luis Miravitlles explicando en una pizarra la teor¨ªa de la relatividad de Einstein en un programa de televisi¨®n.

Antonio Lafuente cree que los cient¨ªficos han contado con la complicidad de los ciudadanos y que el p¨²blico ha apoyado la ciencia, que requiere un esfuerzo pol¨ªtico y econ¨®mico. "Cajal es el cient¨ªfico m¨¢s citado del mundo", afirma.

En el cat¨¢logo, junto a las reproducciones de los materiales gr¨¢ficos, se publican textos de L¨®pez-Oc¨®n, Arroyo Ilera, Campos Mar¨ªn, Chabr¨¢n, Barona, Santesmases, Ord¨®?ez, Ortega, S¨¢nchez Salas, Grayson y Saraiva sobre aspectos como las obras p¨²blicas, la salud de los espa?oles, la ciencia durante la Restauraci¨®n, el exilio cient¨ªfico, la posguerra y el ¨¢tomo.

Jos¨¦ Manuel S¨¢nchez Ron prepara la segunda exposici¨®n de este proyecto que, bajo el nombre de Un siglo de ciencia en Espa?a, se presentar¨¢ en la segunda quincena de este mes en el pabell¨®n Transatl¨¢ntico de la Residencia de Estudiantes. El montaje se centrar¨¢ en los contenidos de la ciencia en la f¨ªsica, la biolog¨ªa o la geolog¨ªa desde el 98 hasta el entorno de la actualidad. "En Espa?a hay varios museos de la ciencia interactivos, para ense?ar a los j¨®venes una ciencia viva, pero no tenemos demasiada experiencia en este tipo de exposiciones que ofrecen una visi¨®n hist¨®rica", declar¨® ayer. "En los ¨²ltimos 30 a?os se ha experimentado una mejora en la atenci¨®n p¨²blica a la ciencia. A principios de siglo hab¨ªa en Espa?a un 70% de analfabetos y era prioritario fomentar la educaci¨®n primaria".

En la Residencia de Estudiantes, frecuentada por Cajal, Severo Ochoa, Grande Covi¨¢n,Negr¨ªn, Del R¨ªo Hortega, Unamuno y Blas Cabrera, en el mismo lugar donde hablaron Einstein y Marie Curie, se van a exponer 60 piezas originales, entre ellas dibujos de Cajal, retratos de Sorolla de los cient¨ªficos Luis Simarro, Jos¨¦ Echegaray y Jos¨¦ R. Carracido, una maqueta del transbordador del Ni¨¢gara de Torres Quevedo, un microscopio electr¨®nico, un sat¨¦lite de Inta y la maqueta del gran telescopio de Canarias.