Austria retira su documento sobre las finanzas de la UE tras el veto de Espa?a

La batalla de la financiaci¨®n de la UE, aunque s¨®lo atraviesa sus primeras fases, se puso ayer al rojo vivo. El ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, anunci¨® ayer en un aparte del Consejo de Ministros comunitario la disposici¨®n de Espa?a a vetar las conclusiones de la cumbre de Viena, que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo fin de semana. Matutes tild¨® a la presidencia austriaca de "ineficaz" y de realizar propuestas desequilibradas sobre la financiaci¨®n de la Uni¨®n, por lo que vet¨® el texto que propon¨ªa. La presidencia capt¨® el mensaje y renunci¨® a su documento.

El ministro espa?ol fue dur¨ªsimo por la ma?ana, vetando el borrador de conclusiones para el pr¨®ximo fin de semana en Viena. Y se mostr¨® relajado por la tarde, cuando el presidente, el austriaco Wolfgang Schl¨¹ssel, renunci¨® incluso a presentarlo a la cumbre como conclusiones propias. "Ha sido una decisi¨®n sensata", alab¨® el espa?ol, con lo que "se facilita que se pueda avanzar m¨¢s en la cumbre", aunque augur¨® para ella escasos frutos. La pol¨¦mica puede reproducirse en la capital austriaca.Lleg¨® incluso a discutir informalmente con sus colegas f¨®rmulas para que otros pa¨ªses ricos, en mayor medida que los menos pr¨®speros, compensen a Alemania, a trav¨¦s de cofinanciar entre Bruselas y los Gobiernos restituciones agr¨ªcolas o programas de investigaci¨®n y desarrollo.

La pipa de la tregua se fum¨® tras una alt¨ªsima tensi¨®n. "Es posible" el veto espa?ol en la cumbre, hab¨ªa asegurado a mediod¨ªa el comedido Matutes, que calific¨® de "biso?os y parciales" a los austriacos. "No ser¨ªa la primera cumbre sin conclusiones", trat¨® de desdramatizar. "Los trabajos de preparaci¨®n de la presidencia no han sido bastante eficaces", critic¨®. "Se ha perdido en propuestas que no son tales y que no han buscado un justo equilibrio entre todas las partes", concret¨®. "Y se ha decantado hacia las posiciones de Austria como pa¨ªs y no como presidencia", elaborando un documento "inadmisible, ins¨®lito e in¨²til", atac¨®.

?nico precedente

S¨®lo en una ocasi¨®n, en diciembre de 1983 -en la cumbre de Atenas-, el Consejo Europeo ha sido incapaz de redactar un documento de conclusiones. La controversia era sobre las consecuencias econ¨®micas del ingreso de Espa?a y Portugal al club comunitario. Y la ausencia de conclusiones se convirti¨® en sin¨®nimo de grave fracaso, del que la comunidad no se recuper¨® hasta a?o y medio despu¨¦s.Aunque Matutes ya hab¨ªa pronosticado este posible resultado ante el Parlamento espa?ol, la amenaza de ayer era m¨¢s concreta, m¨¢s caliente. Porque la formulaba en Bruselas, junto a sus socios. Y, sobre todo, porque la anunciaba despu¨¦s de haber desechado el borrador de conclusiones expuesto anteanoche por el presidente de turno, el austriaco Wolfgang Schl¨¹ssel, una propuesta "que Espa?a vet¨® porque no reflejaba exactamente el estado de la discusi¨®n", adujo. La principal acusaci¨®n es que el texto austriaco ignoraba la pretensi¨®n espa?ola de que los Quince reconociesen la Agenda 2000 (bastante favorable a los intereses espa?oles, pues garantiza unas transferencias a Espa?a similares a las actuales, en torno a un bill¨®n de pesetas anuales, del que una cuarta parte corresponder¨ªa al Fondo de Cohesi¨®n) como ¨²nico documento v¨¢lido para la negociaci¨®n financiera.

El texto incriminado hac¨ªa referencias a los planes de "estabilizar el gasto" (que supondr¨ªa su recorte, y una reducci¨®n para Espa?a superior a los dos billones de pesetas durante el septenio) y a la necesidad de que los Quince negocien sin "ideas preconcebidas" sobre los "desequilibrios presupuestarios" de los que se quejan Alemania y otros pa¨ªses contribuyentes netos.

La delegaci¨®n espa?ola se opone radicalmente a ambas propuestas. No es que se niegue a que figuren como puntos de divergencia en un documento, sino a otorgarles carta de naturaleza, equipar¨¢ndolas como bases de discusi¨®n al texto oficial de la Comisi¨®n. S¨®lo Portugal y Grecia se unieron al veto espa?ol, pese a lo cual, la diplomacia de Madrid sigui¨® negando que Espa?a se encuentre aislada, y asegurando que, aunque lo estuviese, no le temblar¨ªa el pulso por ello.

Con voz, pero sin voto, la Comisi¨®n hizo causa com¨²n con los pa¨ªses sure?os. La comisaria de Pol¨ªtica Regional, Monika Wulf-Mathies, dej¨® claro en el c¨®nclave del domingo que la Agenda 2000 no supone un disparo de los gastos, sino una verdadera "estabilizaci¨®n" de las inversiones estructurales o de solidaridad. M¨¢s a¨²n: una disminuci¨®n real situada entre el 18% y el 20% del total. Frente a este grupo, los pa¨ªses ricos (entre ellos, la banda de los cuatro, compuesta por Alemania, Suecia, Austria y Holanda, m¨¢s Francia y el Reino Unido) consolidan su alianza en pro de una "estabilizaci¨®n del gasto" y avizoran una soluci¨®n c¨®ctel entre las distintas f¨®rmulas que Espa?a rechaza. En esa tesitura, el Gobierno espa?ol renuncia a presentar f¨®rmulas alternativas. Con ello evita a lo mejor que rebanen su postura inicial, pero quiz¨¢ se arriesga a que, dejando de sugerir e influir, las soluciones que los dem¨¢s maduren acaben perjudicando a Espa?a. A ¨²ltima hora, Matutes prodig¨® gui?os a Bonn, discutiendo informalmente f¨®rmulas que alivien su carga presupuestaria, aunque a costa de los otros pa¨ªses ricos.