Adeslas no se presentar¨¢ al nuevo convenio de Muface a pesar de la subida del 33,5%

Adeslas dice no. La mayor aseguradora de salud de Espa?a, y la que atend¨ªa hasta ahora al mayor n¨²mero de funcionarios adscritos a Muface, ha comunicado que no va a presentarse al nuevo convenio 2025-2027, al considerar insuficiente la propuesta econ¨®mica del Gobierno, que contemplaba una subida de las primas que cobrar¨ªan las compa?¨ªas del 33,5% respecto al concierto vigente. Esta negativa vuelve a dejar en el aire la atenci¨®n m¨¦dica de 1,5 millones de empleados p¨²blicos y familiares, que hasta ahora han podido elegir cada a?o entre sanidad p¨²blica o concertada. La compa?¨ªa calcula que si se presentara con las condiciones actuales acumular¨ªa unas p¨¦rdidas de 250 millones en los tres pr¨®ximos ejercicios.

SegurCaixa Adeslas ¡ªcontrolada en un 50,1% por el grupo Mutua Madrile?a y en un 49,9% por CaixaBank¡ª explica que con el convenio actual ya ha perdido 256 millones de euros en los tres ¨²ltimos a?os. Estos n¨²meros rojos son ¡°dif¨ªcilmente asumibles¡± y ¡°de seguir as¨ª, comprometer¨ªan la solvencia y el futuro de la entidad¡±. Estas cifras han sido verificadas por una firma auditora de primera l¨ªnea, seg¨²n detalla la aseguradora.

Adeslas reclamaba al Gobierno un concierto solo por dos a?os y con una subida acumulada de las primas del 47%, para recoger no solo el aumento de la inflaci¨®n y la siniestralidad, sino las nuevas coberturas. El incremento queda lejos de lo propuesto por parte del Ejecutivo para eso dos primeros ejercicios, que es del 28%.

En el vigente convenio 2021-2024, que vence el 31 de diciembre, adem¨¢s de Adeslas tambi¨¦n prestaban asistencia sanitaria a los funcionarios las compa?¨ªas Asisa y DKV. El Ministerio de Funci¨®n P¨²blica ya sac¨® una primera licitaci¨®n para este convenio en noviembre, pero qued¨® desierta. Ahora ha dado de plazo hasta el 15 de enero para que las aseguradoras interesadas se presenten. De acuerdo con fuentes del mercado, DKV tampoco tiene intenci¨®n de acudir y Asisa tendr¨ªa dif¨ªcil asumir el concierto en solitario, por lo que la situaci¨®n de Muface vuelve a estar en un punto cr¨ªtico. Con todo, fuentes de esta ¨²ltima compa?¨ªa explican que ¡°con la subida del 33,5% ha cambiado la situaci¨®n¡±. ¡°Vamos a analizar hasta el ¨²ltimo momento si nos podr¨ªamos presentar, incluso yendo solos¡±, agregan.

Para tratar de ganar tiempo, Funci¨®n P¨²blica ya ha comunicado a las entidades que participan en el convenio actual que va a forzar una pr¨®rroga al menos hasta el 1 de abril de 2025. En caso de que la licitaci¨®n quedara desierta, podr¨ªa extender esa pr¨®rroga hasta finales de septiembre, vali¨¦ndose de la ley de Contratos del Sector P¨²blico. Desde el ministerio explican que con esta medida ¡°se garantiza su cobertura con las condiciones actuales hasta que el convenio actual se sustituya por el nuevo¡±.

El sindicato mayoritario dentro de los funcionarios, CSIF, ha pedido al Gobierno ¡°una reuni¨®n al m¨¢s alto nivel¡± para aclarar la situaci¨®n. Tambi¨¦n piden a las aseguradoras ¡°la m¨¢xima responsabilidad ante la gravedad de la situaci¨®n¡± y recuerdan que durante a?os han colaborado sin problemas con el modelo de Muface: ¡°Les pedimos que no abusen de su situaci¨®n¡±, indican.

El llamado modelo Muface, basado en el mutualismo administrativo, vive sus horas m¨¢s bajas. Este tipo de conciertos para ofrecer sanidad privada a ciertos grupos de funcionarios empez¨® durante el franquismo y se consolid¨® hace 50 a?os, en los albores de la democracia. Durante mucho tiempo, hab¨ªa decenas de compa?¨ªas aseguradoras que participaban en los convenios, pero la cicater¨ªa de los sucesivos Gobiernos en las primas que pagan para compensar la prestaci¨®n de estos servicios sanitarios ha provocado que, poco a poco, todas fueran huyendo. Sanitas, Mapfre, Caser o Axa son algunas de las entidades que en su d¨ªa participaron en conciertos de Muface y que ya no est¨¢n.

En la actualidad, dos tercios de los mutualistas de Muface son profesores de primaria, secundaria y universidades. Tambi¨¦n hay polic¨ªas nacionales, funcionarios de prisiones, inspectores de Educaci¨®n y Hacienda o agentes de Aduanas. La preocupaci¨®n dentro del colectivo es m¨¢xima y desde hace dos meses han realizado diversas movilizaciones para reclamar al Gobierno y a las aseguradoras que se pongan de acuerdo para garantizar la viabilidad del modelo. Los mutualistas de Muface tienen derecho a asistencia sanitaria para ellos y para sus familiares directos (hijos y padres o hermanos a su cargo). Tambi¨¦n est¨¢n cubiertos los funcionarios jubilados.

Las aseguradoras siempre se han quejado de que las primas que recib¨ªan eran escasas. En 2022 la situaci¨®n se exacerb¨® debido a una inflaci¨®n galopante, que lleg¨® a superar el 10%. El incremento de los costes para los proveedores de servicios sanitarios hizo que las p¨¦rdidas hist¨®ricas que generaba el concierto de Muface se agravaran. De acuerdo con los datos sectoriales, Adeslas, Asisa y DKV han perdido en los tres ¨²ltimos a?os 600 millones de euros por la prestaci¨®n de esta asistencia m¨¦dica a empleados p¨²blicos.

En esta coyuntura, el Ministerio de Sanidad ¡ªcontrolado por Sumar¡ª ha aprovechado para publicar un informe en el que se asegura que es perfectamente ¡°viable y razonable¡± que los funcionarios cubiertos por Muface pasen a la Sistema Nacional de Salud. La formaci¨®n pol¨ªtica ya llevaba en su programa una propuesta para ir acabando con este modelo de colaboraci¨®n p¨²blico-privada y la espantada de las aseguradoras ha resultado un momento propicio para impulsarla. En cambio, las comunidades aut¨®nomas, que son quienes tienen la competencia sanitaria, han advertido que la llegada de cientos de miles de funcionarios y familiares supondr¨ªa estresar en exceso la atenci¨®n ambulatoria y hospitalaria.

Muface no es la ¨²nica mutualidad de funcionarios que opera en Espa?a. Los empleados p¨²blicos de la Administraci¨®n de Justicia est¨¢n adscritos a Mugeju (con 91.000 beneficiarios) y los guardias civiles y militares a Isfas (otras 550.000 personas). A diferencia de lo ocurrido con Muface, en estos dos casos s¨ª que se hab¨ªan presentado varias aseguradoras para ofrecer esta cobertura. Asisa y Muface para Isfas y Mugeju, y la Nueva Mutua Sanitaria solo para esta ¨²ltima. Otras compa?¨ªas, como Sanitas y Mapfre, decidieron no acudir a este convenio. Sin embargo, el proceso de licitaci¨®n est¨¢ parado por una medida cautelar adoptada por un tribunal administrativo.

En estos dos casos, los conciertos est¨¢n avanzando porque la composici¨®n de la cartera de beneficiarios es muy distinta. Particularmente, en el caso de Isfas, el colectivo est¨¢ mucho menos envejecido. En el caso de Muface, cada vez la edad media es mayor. Primero, porque cada vez menos funcionarios tienen este beneficio. Y, adem¨¢s, porque los nuevos mutualistas optan mayoritariamente por la sanidad p¨²blica. Esto provoca que la cartera tenga cada vez m¨¢s enfermedades y requiera de mayores atenciones m¨¦dicas, con lo que se aumenta la siniestralidad y se estrechan los m¨¢rgenes, seg¨²n las aseguradoras.