Una t¨ªmida esperanza de democratizaci¨®n
El hermanastro de Sadam regresa a Bagdad con un programa de "democratizaci¨®n" para Irak. Barzan al Takriti, hermanastro del presidente iraqu¨ª, Sadam Husein, se ha convertido en una esperanza para la democratizaci¨®n del r¨¦gimen de Bagdad. Su retorno al pa¨ªs en v¨ªsperas del ¨²ltimo ataque norteamericano ha suscitado todo tipo de expectativas para aquellos sectores de la poblaci¨®n que est¨¢n reclamando desde el interior del sistema cambios en profundidad. Estos medios afirman que Barzan tiene un plan para abrir y cambiar las estructuras del pa¨ªs, respetando al mismo tiempo al l¨ªder. Barzan, fundador de los poderos¨ªsimos servicios de espionaje iraqu¨ª, Muhabarad al Alma, en 1980, regres¨® a Badgad hace pocos d¨ªas, poniendo fin a un exilio que ha durado 10 a?os. La muerte de su esposa, que al parecer se encontraba enferma de c¨¢ncer, habr¨ªa precipitado la decisi¨®n de un regreso sobre el que se ven¨ªa trabajando desde hac¨ªa varios meses.El hermanastro de Sadam ha permanecido durante todo este tiempo asentado en Ginebra, donde ostentaba el cargo de delegado permanente de Irak ante la sede suiza de Naciones Unidas, lo que no le ha impedido, al mismo tiempo, gestionar y administrar en este para¨ªso fiscal la importante fortuna personal del presidente de la rep¨²blica. Barzan negoci¨® el regreso directamente a su pa¨ªs a trav¨¦s de su hijo Mohamed, quien efectu¨® al menos tres viajes a la capital iraqu¨ª para entrevistarse con algunos componentes de la familia para que intercedieran favorablemente ante el propio Sadam Husein para que ¨¦ste aceptara el retorno del hermano pr¨®digo sin ning¨²n tipo de represalias y le concediera un visado, seg¨²n se asegura en c¨ªrculos diplom¨¢ticos de Bagdad.
Los obst¨¢culos m¨¢s importantes para la vuelta de Barzan a casa lo ha constituido Uday, el hijo mayor de Sadam, quien se encuentra desde hace tiempo divorciado de una hija del exiliado. La separaci¨®n gener¨® en su momento graves tensiones entre los diferentes miembros de la familia, abriendo una "guerra a muerte" entre Barzan y Uday, que se ha saldado con episodios tan cruentos como el asesinato en Amman, el pasado mes de noviembre, de algunos de los implicados en la lucha intestina, seg¨²n public¨® la prensa en su momento. Barzan, contin¨²an los medios diplom¨¢ticos, habr¨ªa regresado al pa¨ªs con un programa de "democratizaci¨®n del r¨¦gimen", a partir de sus propias estructuras, lo que permitir¨ªa a Sadam continuar en la c¨²spide del poder, modificada aparentemente la situaci¨®n interior de Irak, y frenar sobre todo las exigencias de los norteamericanos, que desde el pasado mes de noviembre apoyan de forma incondicional a los grupos de oposici¨®n para que provoquen la ca¨ªda del n¨²mero uno del r¨¦gimen.
El memor¨¢ndum de Barzan plantea la necesidad de que el r¨¦gimen de Bagdad abandone su estructura familiar y abra generosamente sus puertas a los hombres de confianza que se encuentran en el partido gubernamental Baas. El estudio sugiere, adem¨¢s, una importante reestructuraci¨®n de los servicios de seguridad, del Ej¨¦rcito y de los servicios secretos, poniendo al frente de ellos a algunos tecn¨®cratas profesionalmente competentes.
Los proyectos ambiciosos de Barzan sugieren asimismo una reconciliaci¨®n nacional con todos los grupos opositores, m¨¢s de un centenar, que se encuentran distribuidos por el mundo, provocando continuos incidentes desde el exterior y da?ando la imagen del r¨¦gimen. El regreso de estos opositores estar¨ªa avalado por una redefinici¨®n de las libertades pol¨ªticas y p¨²blicas del pa¨ªs, permitiendo la actividad de determinadas organizaciones pol¨ªticas y c¨ªvicas y acabando as¨ª con el monopolio de los baasistas. La propuesta, en principio, fue aceptada por el propio Sadam Husein el pasado a?o, se insiste en c¨ªrculos diplom¨¢ticos, lo que permiti¨® acercar a los dos hombres. Barzan, tras esta reconciliaci¨®n, efectu¨® unas declaraciones a la prensa ¨¢rabe editada en Londres. All¨ª, el hermanastro anunci¨® su inminente regreso al pa¨ªs, rindi¨® pleites¨ªa al l¨ªder y desminti¨® las afirmaciones que aseguraban que se negaba a abandonar Suiza, donde algunas fuentes dec¨ªan incluso que hab¨ªa pedido asilo pol¨ªtico.
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