Detroit prepara la primera l¨ªnea el¨¦ctrica superconductora de gran capacidad
Tras 87 a?os de alternancia entre el entusiasmo y la decepci¨®n, y una d¨¦cada despu¨¦s de un descubrimiento tras el cual la clave para el ¨¦xito parec¨ªa alcanzable, la primera l¨ªnea el¨¦ctrica superconductora del mundo est¨¢ a punto de hacerse realidad. Un hilo superconductor puede conducir grandes corrientes el¨¦ctricas con mucha menos resistencia que un tendido convencional, y que, por tanto, conserva energ¨ªa. La primera l¨ªnea superconductora de gran capacidad, que comenzar¨¢ a funcionar a mediados del a?o 2000 en Detroit (EEUU), medir¨¢ 122 metros. S¨®lo se necesitar¨¢n unos 125 kilos de un nuevo tipo de cable superconductor para conducir la misma corriente que los 9.000 kilos de cable de cobre que sustituir¨¢.Los expertos dicen que la l¨ªnea demostrar¨¢ que la transmisi¨®n a gran escala de corriente el¨¦ctrica mediante la superconducci¨®n es factible, y ser¨¢ la primera de muchas como ella. Al anunciar un contrato en el que se ofrece el apoyo federal al proyecto, el secretario estadounidense de Energ¨ªa, Bill Richardson, ha predicho que, a la larga, este tipo de tendidos el¨¦ctricos, que explotan las propiedades de los llamados superconductores a alta temperatura, podr¨ªan ahorrar al pa¨ªs 6.000 millones de d¨®lares al a?o. Otra ventaja es que la industria de la electricidad podr¨ªa reducir dr¨¢sticamente la contaminaci¨®n producida por las centrales el¨¦ctricas.
Consorcio
Paul M. Grant, del Instituto de Investigaci¨®n de la Energ¨ªa El¨¦ctrica de Palo Alto, California, dijo que ya se hab¨ªan probado longitudes de hasta 42 metros de la l¨ªnea superconductora. La nueva l¨ªnea el¨¦ctrica ser¨¢ construida por un consorcio formado por la American Superconductor Company (Massachusetts), que proveer¨¢ el cable superconductor; Pirelli Cables and Systems (Italia), que montar¨¢ el cable y construir¨¢ el tendido el¨¦ctrico; la Lotepro Corporation de Valhalla, Nueva York, que proporcionar¨¢ los equipos de refrigeraci¨®n que mantendr¨¢n el nitr¨®geno l¨ªquido circulando por el tendido, y el Instituto de Investigaci¨®n de la Energ¨ªa El¨¦ctrica. La l¨ªnea costar¨¢ unos 5,5 millones de d¨®lares (770 millones de pesetas).El f¨ªsico holand¨¦s Haike Kamerlingh Onnes descubri¨® la superconductividad en 1911, mientras utilizaba helio l¨ªquido a 275?C bajo cero para enfriar mercurio. Vio que a esa temperatura el mercurio pierde toda la resistencia a la corriente el¨¦ctrica. La f¨ªsica de la superconductividad es compleja y a¨²n quedan bastantes interrogantes. Un superconductor, cuando es enfriado lo suficiente, experimenta cambios que afectan a sus electrones conductores, los electrones libres que circulan normalmente en un metal y pueden transmitir la corriente el¨¦ctrica.
Por maravilloso que parezca, su aplicaci¨®n extensa no se pudo empezar a planear hasta la d¨¦cada pasada, cuando se descubrieron superconductores que no exigen, como los cl¨¢sicos, baj¨ªsimas temperaturas, sino que dejan de oponer resistencia al paso de la electricidad a temperaturas m¨¢s altas y menos costosas que el helio l¨ªquido.
American Superconductor adquiri¨® docenas de patentes que permitieron a la empresa producir un material superconductor adecuado para una l¨ªnea el¨¦ctrica. El material que se utiliza para la de Detroit es el BSCCO-2223, una mezcla de polvo fino compuesta por bismuto, estroncio, calcio y ¨®xido de cobre, con una peque?a cantidad de plomo.
"Adquirimos los polvos comercialmente, los mezclamos, los empaquetamos en tubos de plata y en ¨²ltimo t¨¦rmino moldeamos los tubos pas¨¢ndolos por matrices para conseguir microfilamentos que contengan al superconductor", comenta John Howe, vicepresidente de American Superconductor. "Despu¨¦s hacemos alambres con los filamentos y los enviamos a Pirelli para la fabricaci¨®n de los cables". Pirelli fabrica con los cables una especie de h¨¦lice alrededor de un canal por el cual que fluye el nitr¨®geno l¨ªquido fr¨ªo, y tras esa operaci¨®n envuelve los cables superconductores con capas de aislamiento.
Seg¨²n Howe, la l¨ªnea resultante no elimina por completo la resistencia el¨¦ctrica. Cuando una fibra entra en contacto con otra, la corriente elt¨¦rmica y el¨¦ctrico¨¦ctrica superconductora se interrumpe. Cuando pasa por el revestimiento de plata que envuelve el superconductor BSCCO debe adoptar la forma de corriente com¨²n, ya que el revestimiento de plata no es un superconductor. Aun as¨ª, la capacidad de la l¨ªnea ser¨¢ tres veces mayor que la de la l¨ªnea de cobre.
Nueve de las actuales l¨ªneas de conducci¨®n el¨¦ctrica de cobre de 10 cent¨ªmetros que conectan una estaci¨®n transformadora con la red de distribuci¨®n de Detroit se sustituir¨¢n por tres l¨ªneas superconductoras enfriadas con nitr¨®geno l¨ªquido que circula por el centro de los cables. Seg¨²n Howe, una ventaja es que el problema de dispersar el calor producido por una l¨ªnea de conducci¨®n el¨¦ctrica es mucho menos grave para una l¨ªnea superconductora que para una convencional. Cada cable superconductor de 10 cent¨ªmetros conducir¨¢ 2,400 amperios a 2.400 voltios, pero Grant dice que podr¨ªa pasar bastante tiempo antes de que esas l¨ªneas se vayan a utilizar para largas distancias.
The New York Times
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.