Reactivar la arquitecturaJOSEP M. MONTANER

Desde el mes de octubre recorre el mundo de la arquitectura el s¨ªndrome de una nueva Ley de Ordenaci¨®n de la Edificaci¨®n que, por su redacci¨®n, disminuir¨ªa las competencias de los arquitectos disueltas entre las responsabilidades de otros t¨¦cnicos como los ingenieros de caminos. Este hecho ha provocado un movimiento entre estudiantes y arquitectos para forzar la revisi¨®n del texto del anteproyecto de la futura ley, cosa que se ha conseguido de momento. Durante unas semanas parec¨ªa que, de golpe, se iba a dilapidar todo lo que se hab¨ªa conseguido en el campo de la arquitectura espa?ola, tan cualificada y desarrollada en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas. Parec¨ªa que ¨ªbamos a asistir a una especie de potlatch, consumiendo instant¨¢neamente toda la calidad arquitect¨®nica acumulada. M¨¢s preocupante que las futuras coordenadas legislativas es que se produzca o no una p¨¦rdida real de la calidad arquitect¨®nica y un debilitamiento del debate cultural. En el caso de Barcelona, este fantasma de la crisis y la falta de ideas campea ya hace un par de a?os. En los ¨²ltimos meses, algunos s¨ªntomas han puesto m¨¢s en evidencia esta situaci¨®n de des¨¢nimo: por ejemplo, la supresi¨®n del departamento de Arquitectura del Macba; la disminuci¨®n del inter¨¦s por la arquitectura y la ciudad por parte del Centro de Cultura Contempor¨¢nea de Barcelona, un centro cultural que hab¨ªa tomado la ciudad como emblema, o la escasa convocatoria que han tenido algunos concursos municipales recientes. Sin embargo, m¨¢s all¨¢ de las crisis end¨¦micas de una profesi¨®n y de las mutaciones en los marcos legislativos, lo m¨¢s importante es detectar elementos positivos, actitudes que muestren una apertura de miras y conceptos por parte de los arquitectos. En este sentido se han producido en las ¨²ltimas semanas dos hechos altamente positivos: el inicio de la nueva titulaci¨®n de paisajismo en la Escuela de Arquitectura de Barcelona y la presentaci¨®n de la exposici¨®n y el cat¨¢logo Met¨¢polis en la galer¨ªa Ras, en la calle dels ?ngels. Esta nueva titulaci¨®n de graduado superior en paisajismo creada por la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a afronta una nueva escala y un nuevo campo de intervenci¨®n de los arquitectos en Espa?a, que tiene ya un desarrollo muy importante en otros pa¨ªses: Estados Unidos, Brasil y Reino Unido. Se trata de formar t¨¦cnicos capaces de intervenir en el territorio y en el espacio abierto a partir de los nuevos conceptos e instrumentos del cambio de siglo: leyes formales del territorio y de los ecosistemas, ecolog¨ªa artificial, sostenibilidad, gran escala, relaci¨®n entre los objetos y reciclaje de los preexistentes. El 4 de diciembre se inauguraba oficialmente la titulaci¨®n con una conferencia de la prestigiosa paisajista norteamericana Martha Schwartz. La mejor forma de responder a las reglamentaciones ambiguas y a las crisis de competencias es dar un salto hacia adelante formando profesionales en nuevos campos en los que el utillaje mental de la arquitectura pueda hacer aportaciones. Por su parte, el grupo de arquitectos Met¨¢polis ha planteado para su primera aparici¨®n en p¨²blico una colecci¨®n de propuestas y acciones, con un alto grado de experimentalismo y prospecci¨®n, pensadas para el ¨¢rea metropolitana de Barcelona. Agrupados en cinco apartados distintos -strips, nudos, cu?as, fingers y hot points- se encadenan y relacionan una treintena de proyectos, manifiestos, fotograf¨ªas, im¨¢genes y textos realizados por una veintena de equipos de arquitectos distintos. Aunque los autores son muy heterog¨¦neos, la mayor¨ªa de proyectos se relacionan y anudan unos con otros, con elementos, referencias, ideas y sistemas visuales comunes. Se podr¨¢ objetar que bastantes proyectos parten de unas premisas excesivamente optimistas y poco cr¨ªticas con las leyes capitalistas de consumo de territorio, adoptando un aire neoliberal y tecnocr¨¢tico. Es cierto, pero al mismo tiempo la capacidad para abrir el debate, la audacia de sugerencias y reinvenciones, y la evidencia de que la cr¨ªtica arquitect¨®nica puede tambi¨¦n concretarse en proyectos y manifiestos, convierten Barcelona Met¨¢polis en un hito importante, no s¨®lo para la ciudad, sino para el panorama internacional. A la cultura arquitect¨®nica barcelonesa, tan realista y pragm¨¢tica, siempre le ha faltado esta vertiente experimental y vanguardista, capaz de jugar con los conceptos y de imaginar soluciones liberadas del constre?imiento de la estricta realidad. En pa¨ªses como Holanda, cuya arquitectura tanto deslumbra actualmente o como Francia, que ha recuperado cierto liderazgo en el contexto contempor¨¢neo, se ha alcanzado un periodo de auge a fuerza de a?os de inversi¨®n, becas, premios, concursos, exposiciones para promover a los j¨®venes e institutos de arquitectura para incentivar la creatividad, la calidad y la cultura. Que aumente la preparaci¨®n acad¨¦mica y el debate cultural, y que tomen mayor relevancia los t¨¦cnicos que intervienen en la mediana y gran escala, en el paisaje y en el territorio, los que piensan m¨¢s en los sistemas, relaciones y redes entre los objetos que en proyectar los objetos aut¨®nomos; todo ello es una buena noticia, la mejor respuesta a la crisis conceptual y legal de la arquitectura espa?ola. En este sentido, la provocaci¨®n al debate por parte del grupo Met¨¢polis es vital en el ambiente aletargado y conformista de Barcelona. Mientras el discurso oficial es el de la participaci¨®n, la transparencia y la democracia, la realidad de la discusi¨®n en el terreno del urbanismo y el planeamiento es totalmente otra. ?Hay algo m¨¢s antidemocr¨¢tico y oscuro que la manera como se gestiona el nuevo Plan General Metropolitano, que nunca se acaba de presentar completamente a la luz p¨²blica; o la manera como se llevan adelante los proyectos de gran escala gestionados por Barcelona Regional, siempre blindados por el mayor secretismo y desconfianza? ?Se corresponde con la cultura contempor¨¢nea del cambio del siglo que las decisiones sobre el futuro metropolitano y territorial sigan siendo llevadas en secreto, sin atender a opiniones y asesoramientos, exposiciones p¨²blicas y debates abiertos? Ante esta realidad de un planeamiento territorial gestionada de manera anacr¨®nica, cerrada y personalista, las propuestas de Met¨¢polis, por muy te¨®ricas y marginales que puedan ser, se convierten en una ventana que plantea la posibilidad de que existan otros caminos para pensar, proyectar y gestionar las estructuras metropolitanas. La normalidad democr¨¢tica consistir¨ªa en que hubiera muchas plataformas llenas de ideas y propuestas como Met¨¢polis en Barcelona.

Josep Maria Montaner es arquitecto.