Pacifismo acad¨¦mico
Al Centro Internacional Bancaja para la Paz y el Desarrollo, radicado en Castell¨®n, le han nacido sus primeros hijos. Este foro, dedicado a estudios e investigaciones sobre la paz, ha creado una red de centros que pretende formar l¨ªderes mundiales para que sus respectivos pa¨ªses ahonden en las f¨®rmulas menos traum¨¢ticas para la resoluci¨®n de situaciones que amenazan con desembocar en una guerra. Ahora la Universidad Jaume I, que presta cobertura cient¨ªfica a esa criatura, puede ya expedir t¨ªtulos a medias con las universidades de Toluca (M¨¦xico), Bogot¨¢ (Colombia) y Segirpe (al sur del centro tur¨ªstico brasile?o de Salvador de Bah¨ªa). A los tres cl¨®nicos castellonenses le van a seguir otros en gestaci¨®n, en Islamabad (Pakist¨¢n), Tanzania y el Tibet. A ellos les seguir¨¢, aunque est¨¢ un poco m¨¢s verde, otro en Jerusal¨¦n, auspiciado por una universidad que admite por igual a palestinos y jud¨ªos. El t¨ªtulo que avala este centro es el del Master de la Paz, una titulaci¨®n, compuesta por tres cursos y una tesis, que comenz¨® su andadura hace cuatro a?os en Benic¨¤ssim y que se ha ido consolidando como una de las mejores ofertas sobre el desarme mundial y la distensi¨®n internacional. El alumbramiento de este master se debe a la tenaz labor de su actual director, Vicent Mart¨ªnez Guzm¨¢n, profesor de Filosof¨ªa en la Universidad castellonense. Ahora, el centro dispone de una sede permanente en la Fundaci¨® Caixa Castell¨®, con una excelente biblioteca, una de las mejores bases de datos sobre la paz, y una sala de ordenadores donde bucear en archivos y centros de documentaci¨®n. El 11 de enero estos cursos abrir¨¢n otra vez sus puertas, en su cuarta edici¨®n, que se prolongar¨¢ por primera vez medio a?o y tendr¨¢ unos 50 estudiantes. "Hemos tenido inscritos de los cinco continentes y este a?o", detalla Mart¨ªnez Guzm¨¢n, "se estrenan Vietnam, el S¨¢hara Occidental, Moldavia y las Islas Fidji". El origen profesional de todos ellos es variado: "M¨¦dicos, diplom¨¢ticos, ingenieros, abogados, fil¨®sofos y profesores, entre otros, forman la larga lista de nuestro master", apunta. "Incluso hemos tenido a militares chinos e hind¨²es form¨¢ndose entre nosotros", a?ade. A todos ellos se les han ofrecido recetas actualizadas de c¨®mo fabricar la paz. Esta especie de internacional pacifista tiene reservado el derecho de admisi¨®n a partes iguales a estudiantes del Norte y del Sur; una mitad dirigida a estudiantes de Occidente, y la otra, a los de pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo. Los alumnos de los pa¨ªses ricos desembolsar¨¢n 800.000 pesetas en concepto de matr¨ªcula y alojamiento; a los del llamado Tercer Mundo, el master les saldr¨¢ gratis. Estos ¨²ltimos llegar¨¢n con un billete de avi¨®n costeado por la Generalitat, que sufraga con unos 10 millones de pesetas este proyecto, y permanecer¨¢n en apartamentos, recibiendo una asignaci¨®n diaria para comidas y gastos, a trav¨¦s de becas costeadas por los ayuntamientos de Alquer¨ªas, Betx¨ª, Borriol, Castell¨®n y La Vall d"Uix¨®, la Diputaci¨®n castellonense y la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n Internacional. "De esta forma conseguimos el aprendizaje rec¨ªproco", apunta el director del master. "Creemos positiva esta diversidad cultural y que se lleguen a sentar juntos en la misma mesa estudiantes oriundos de pa¨ªses que sobre el papel son enemigos ac¨¦rrimos, como es el caso de Pakist¨¢n y la India", explica. El departamento de Filosof¨ªa y Sociolog¨ªa de la Jaume I, convertida por unos meses en una Universidad por la Paz, ya ha cursado las correspondientes invitaciones a los 25 profesores de todo el mundo que impartir¨¢n las clases. "Algunos corresponden a aventajados alumnos de nuestros primeros cursos", admite satisfecho Mart¨ªnez Guzm¨¢n, quien no oculta que la nueva red de centros que se est¨¢ creando puede constituir una excelente arma para combatir conflictos b¨¦licos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.