Los efectos del mal corte

Cuando se habla de sobredosis, en realidad se est¨¢ haciendo referencia a una intoxicaci¨®n aguda por derivados opi¨¢ceos. Eso suele significar que el toxic¨®mano ha consumido hero¨ªna adulterada con sustancias de muy mala calidad (lo que se llama un mal corte) o, por el contrario, que ha tomado una droga de mayor pureza a la que acostumbra, con lo que, con la misma dosis, el efecto es demoledor para su salud.En el centro de emergencias de La Rosilla indican que el grado de pureza habitual de la hero¨ªna que se vende en el poblado no supera el 4%. "Durante todo el mes de enero, cuando ocurrieron algunos fallecimientos, la frase que m¨¢s se escuchaba era que se vend¨ªa un mal corte", explican. "Lo que no suele pasar, salvo que el drogodependiente se quiera suicidar, es que se meta dos gramos de hero¨ªna cuando el d¨ªa anterior consum¨ªa uno", a?aden.

Esta intoxicaci¨®n aguda tiene dos fases: una de excitaci¨®n y otra de depresi¨®n. En la primera, el afectado sufre zumbidos de o¨ªdos, actividad sensorial exaltada, agitaci¨®n, mirada brillante, sed intensa y pulso y respiraci¨®n lentos e intermitentes. La segunda es la que despierta la alarma, ya que en ella el toxic¨®mano sufre coma profundo y colapso.

En 1997 hubo en Madrid 141 muertes por sobredosis, 9 menos que el a?o anterior, seg¨²n la Agencia Antidroga.