La Comunidad asume las competencias sobre la Casa de Campo y la Ciudad Universitaria

El Ayuntamiento es ya poco m¨¢s que un inquilino en la Ciudad Universitaria y en la Casa de Campo. El Consejo de Gobierno de la Comunidad acord¨® ayer declarar bien de inter¨¦s cultural estos dos espacios urbanos. A partir de la publicaci¨®n del acuerdo en el Bolet¨ªn Oficial de la Comunidad, el consistorio tendr¨¢ que pedir permiso al Gobierno regional para autorizar obras en estas ¨¢reas: igual que un inquilino debe hacer con su casero. Alberto Ruiz-Gallard¨®n ha resuelto estos expedientes, empantanados desde hace a?os, en s¨®lo dos meses y cinco d¨ªas.

La Consejer¨ªa de Cultura justifica la declaraci¨®n de estas zonas como bienes de inter¨¦s cultural en la necesidad de proteger y delimitar ambos espacios de inter¨¦s hist¨®rico-art¨ªstico. En el caso de la Ciudad Universitaria, que ha alcanzado la m¨¢xima protecci¨®n patrimonial en la categor¨ªa de conjunto hist¨®rico, el Gobierno cree que se encuentra sometida a un "grave deterioro" a causa de la construcci¨®n de nuevas edificaciones y a "las transformaciones de la red viaria que cruza el conjunto". La Casa de Campo, monumento hist¨®rico-art¨ªstico desde 1931, seg¨²n la Comunidad, no ten¨ªa sus l¨ªmites bien definidos y se hac¨ªa precisa "una delimitaci¨®n del bien que asegure su mejor protecci¨®n". Con estas razones, el 27 de noviembre, el Gobierno regional decidi¨® resucitar ambos expedientes y emprender, de paso, su particular guerra con el Ayuntamiento de Madrid y tres universidades. Los dirigentes municipales se unieron a los rectores de la Complutense, la P¨®lit¨¦cnica y la UNED para presentar alegaciones contra los planes regionales.

El grupo empresarial que explota el Parque de Atracciones tambi¨¦n present¨® alegaciones contra la protecci¨®n de la Casa de Campo, donde se encuentra el complejo de ocio desde hace a?os gracias a una concesi¨®n municipal. Hasta la Presidencia del Gobierno se quej¨® para que el palacio de la Moncloa no quedase dentro del per¨ªmetro de la Ciudad Universitaria. S¨®lo esta alegaci¨®n ha sido admitida. Los argumentos de los rectores, del gobierno municipal y del Parque de Atracciones han sido desestimados por la Comunidad de Madrid.

Jard¨ªn hist¨®rico

En el caso de la Casa de Campo, el Ayuntamiento de Madrid hab¨ªa reclamado que este parque urbano no fuese declarado jard¨ªn hist¨®rico. La principal alegaci¨®n se fundamentaba en que el actual "Plan de General de Madrid es suficiente marco normativo" para proteger la Casa de Campo. El Gobierno de Alberto Ruiz-Gallard¨®n, en cambio, la desestim¨® bas¨¢ndose en que el Plan General de Madrid "ha resultado insuficiente, ya que va dirigido, como es su objeto, a la ordenaci¨®n y al establecimiento del r¨¦gimen del suelo", no as¨ª a la necesaria protecci¨®n del patrimonio hist¨®rico y medioambiental. El consistorio tambi¨¦n arguy¨® que la declaraci¨®n como bien de inter¨¦s cultural de la Casa de Campo interfer¨ªa "en la competencia municipal sobre ordenaci¨®n de usos". La Comunidad le replic¨® que "el expediente no afecta la ordenaci¨®n de usos municipal".

El Zool¨®gico, el Parque de Atracciones y el Telef¨¦rico presentaron tres alegaciones conjuntas al expediente protector. La principal se basaba en que "la Casa de Campo no es jard¨ªn, sino un reservado, y tampoco es hist¨®rico". La Consejer¨ªa de Cultura replic¨® calificando de "peculiar" la alegaci¨®n y a?adi¨® que las empresas que la han presentado olvidan que un decreto de 1931 ya afirmaba que "la totalidad" de este parque era un jard¨ªn perteneciente a la Corona. Si en aquel momento no se le confiri¨® la categor¨ªa de jard¨ªn hist¨®rico, sino de monumento hist¨®rico-art¨ªstico, fue simplemente porque esta categor¨ªa no exist¨ªa. Ahora, la Comunidad se lo concede.

Falta de significaci¨®n

El Club de Campo tambi¨¦n se opuso a la protecci¨®n del jard¨ªn en la zona que le afecta por su "falta de significaci¨®n hist¨®rica". La Comunidad lo rechaza con el argumento de que la finca del Club de Campo tambi¨¦n perteneci¨® en su momento a la Corona y, por lo tanto, forma parte del jard¨ªn hist¨®rico. En el caso de la Ciudad Universitaria, bien de inter¨¦s cultural en su categor¨ªa de conjunto hist¨®rico desde ayer, el Ayuntamiento insisti¨® en sus alegaciones en que el Plan General de Madrid ya la protege suficientemente y que la Comunidad no hab¨ªa delimitado con exactitud la zona afectada. Ambas alegaciones fueron tambi¨¦n rechazadas.

En este frente, fueron las universidades Complutense, Polit¨¦cnica y UNED las que dieron la batalla. Argumentaron que la declaraci¨®n "atenta contra el derecho fundamental a la educaci¨®n y otros de rango constitucional", que "la ausencia de consulta previa puede constituir un fraude de ley" y que la Ciudad Universitaria no encaja en la definici¨®n de conjunto hist¨®rico".

Con respecto a este ¨²ltimo argumento, la respuesta de la Comunidad ha sido muy dura. "Si en la ciudad de Madrid hay alguna agrupaci¨®n de bienes inmuebles ejemplar que responda a esta definici¨®n, adem¨¢s del recinto hist¨®rico de la Villa de Madrid, es precisamente la Ciudad Universitaria, empe?o y fundaci¨®n ejemplar, que se ha venido transformando, y no siempre con acierto, a pesar de las protecciones sucesivas del planeamiento municipal". De todas las alegaciones presentadas, la Comunidad de Madrid s¨®lo ha aceptado la del Ministerio de Presidencia, que consider¨® que el complejo de La Moncloa deb¨ªa ser excluido del conjunto monumental por "razones de seguridad". El Gobierno regional ha aceptado estos argumentos.