EH acepta una apuesta por "las v¨ªas pol¨ªticas" pero no condena de forma expresa la violencia

PNV, EA y EH consensuaron ayer un texto en el que "apuestan por las v¨ªas pol¨ªticas y democr¨¢ticas" como una f¨®rmula que, seg¨²n declar¨® el portavoz del PNV, Joseba Egibar, es "incompatible con las v¨ªas violentas". "No nos vale cualquier cosa", dijo antes Xabier Arzalluz: "Si apuestan por la pol¨ªtica es que abandonan las v¨ªas violentas, aunque no lo digan". La f¨®rmula empleada se dar¨¢ a conocer hoy en el Parlamento vasco, pero seg¨²n explicaron ayer algunos de sus protagonistas, deja "absolutamente claro, para quien quiera ver", que EH ha entrado en la pol¨ªtica con todas las consecuencias.

"Ahora ser¨¢ el d¨ªa a d¨ªa", declar¨® el portavoz del PNV, el que confirme esa apuesta, "pero en un momento como ¨¦ste es importante que se haya dado este paso en la direcci¨®n correcta".El documento que Euskal Herritarrok (EH, la marca electoral de HB) firm¨® ayer por la tarde, despu¨¦s de varios borradores rechazados por la Mesa Nacional de la coalici¨®n independentista, "es un paso importante en un momento como ¨¦ste", coment¨® Egibar. La declaraci¨®n de los tres partidos nacionalistas, de cinco puntos, es fruto de m¨¢s de 15 d¨ªas de negociaciones e intentonas frustradas.

El texto ser¨¢ aprobado hoy previsiblemente como una enmienda transaccional a una proposici¨®n no de ley del PSE-EE en la que se ped¨ªa una condena parlamentaria de la violencia callejera y de las amenazas que vienen recibiendo los cargos electos socialistas y populares. Esta condena como tal no se incluye en el texto consensuado por las fuerzas nacionalistas, por lo que representantes del PNV y EA ya se hab¨ªan apresurado a advertir en los ¨²ltimos d¨ªas que nadie deb¨ªa esperar "milagros" ni que fuera a darse satisfacci¨®n a las exigencias del PSE y PP.

La "apuesta por las v¨ªas pol¨ªticas y democr¨¢ticas" que se hace en el documento implica para el PNV que EH cumple la exigencia de desmarque de la violencia que estableci¨® el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, para aceptar el apoyo externo de EH a su Gobierno en minor¨ªa. Xabier Arzalluz interpretaba ayer que "no se le puede pedir al AVE que pare en quince metros", justificando que la renuncia a los m¨¦todos violentos pueda no ser tan expl¨ªcita como exigen PP y PSE.

Sin embargo, Arzalluz tambi¨¦n advirti¨® de que ese documento exigido por el lehendakari, y por los dem¨¢s partidos, no puede convertirse en un texto para intelectuales: "No nos vale cualquier cosa, y no iremos de la mano con un partido que no condene los m¨¦todos violentos". Pero a?adi¨®: "Una apuesta clara por la pol¨ªtica supone abandonar las v¨ªas violentas". Es decir, el PNV justifica que no se pueda poner el list¨®n muy alto a la hora de exigir que las palabras sean meridianamente claras, y pide "comprensi¨®n" para el proceso de paz. Que la declaraci¨®n conjunta no incorpore una condena expl¨ªcita de la violencia parece un hecho a la vista de c¨®mo se ha desarrollado el proceso y de unas declaraciones de ayer mismo del portavoz de la Mesa Nacional de HB, Joseba Permach: "La violencia callejera es fruto de la reacci¨®n de los militantes pol¨ªticos ante la existencia de una violencia estrat¨¦gica desplegada por Francia y por Espa?a en la que el Estado ejerce un sabotaje permanente desde el monopolio de la violencia".

El hecho de que varios textos que consideraban incompatible la violencia y la pol¨ªtica de manera expl¨ªcita no salieran adelante, a pesar de que algunos dirigentes de EH los consideraran v¨¢lidos, tambi¨¦n augura que la enmienda de los nacionalistas va a ser un acto de fe.

El presidente del PP, Carlos Iturgaiz, y el portavoz socialista, Fernando Buesa, ya adelantaron ayer que no van a apoyar el texto.