La demolici¨®n de un edificio hist¨®rico en Toledo lleva a Medio Ambiente al juzgado

Prevaricaci¨®n de funcionario p¨²blico, delito contra el patrimonio y da?os son los ejes de la querella presentada por la oposici¨®n del Ayuntamiento de Toledo, gobernado por el PP, contra la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Tajo por la demolici¨®n de las llamadas turbinas de Vargas, un edificio del siglo XIX que estaba situado junto al r¨ªo Tajo y a la sombra del Alc¨¢zar. La querella fue admitida a tr¨¢mite el viernes por el Juzgado n¨²mero 4 de Toledo. En plena pol¨¦mica, la CHT alega que no necesitaba permisos municipales al tratarse de obras de "inter¨¦s general".

El pasado 14 de enero m¨¢quinas y piquetas de la empresa Juan Nicol¨¢s e Hijos, SA, se acercaban a orillas del Tajo para cumplir la orden de la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Tajo (CHT), que depende del Ministerio de Medio Ambiente, de derribar el edificio conocido como las turbinas de Vargas. Construido en 1870, el inmueble acogi¨® hasta mediados del presente siglo los ingenios que suministraban agua y electricidad a Toledo. En 1992, el Ayuntamiento de la capital castellano-manchega y la Real Fundaci¨®n de Toledo destinaron m¨¢s de 30 millones de pesetas para su rehabilitaci¨®n y conversi¨®n en una escuela-taller. "No deja de tener su iron¨ªa", comenta el concejal socialista Roberto L¨®pez, "que hayan demolido un edificio destinado a formar a los j¨®venes en asuntos de rehabilitaci¨®n". Los 10 ediles socialistas y los dos de Izquierda de Castilla-La Mancha son los impulsores de la querella citada, que insiste en que "les gustara o no su dise?o a los dirigentes del PP, el edificio de las turbinas de Vargas estaba protegido por el plan especial del casco hist¨®rico de Toledo".Al margen de los debates jur¨ªdicos y t¨¦cnicos sobre el grado de protecci¨®n del inmueble derribado, que durante las ¨²ltimas semanas han marcado la actualidad en Toledo, nadie discute que la sede de la escuela-taller se encuentra dentro del ¨¢rea del centro hist¨®rico. A pesar de reconocer que la CHT cometi¨® un error al derribar sin licencia municipal la turbina de Vargas, el presidente de esta entidad, Jos¨¦ Antonio Llanos, aclar¨® ayer a este diario, que "las obras de inter¨¦s general est¨¢n exentas de la necesidad de pedir permisos".

"Adem¨¢s", agreg¨®, "el edificio era de una total vulgaridad y su derribo obedece al plan de reconstruir en ese emplazamiento el ingenio de Juanelo Turriano, una obra clave de ingenier¨ªa del siglo XVI que bombeaba agua del Tajo hasta Toledo, as¨ª como al proyecto municipal de construir un museo del agua. Quiz¨¢ en este caso pudo ser una equivocaci¨®n no pedir permiso. Pero una cosa es una equivocaci¨®n y otra es una obligaci¨®n". Tras achacar la pol¨¦mica a intereses electorales de la oposici¨®n, a cuatro meses de los comicios locales, Llanos se?al¨® que "el proyecto y el presupuesto para reconstruir el ingenio de Turriano ya cuentan con la luz verde del Ministerio de Medio Ambiente".

Pero incluso arquitectos como Ignacio Gonz¨¢lez Tasc¨®n, miembro de la Fundaci¨®n Juanelo Turriano, subrayan que los planes de futuro "tienen su l¨®gica, pero la forma en que se ha derribado el edificio est¨¢ muy mal planteada".