Apenas 4.000 personas en el Bernab¨¦u

Solamente 4.000 personas, haciendo un c¨¢lculo generoso, acudieron anoche al estadio Santiago Bernab¨¦u. La falta de expectaci¨®n hizo innecesaria las habituales medidas de seguridad. Las calles no se cortaron. Las fuerzas de seguridad se redujeron al m¨ªnimo y en las puertas del estudio se clausuraron algunos de los tornos.El Real Madrid se jugaba su pase a las semifinales de la Copa del Rey pero a su afici¨®n le tra¨ªa sin cuidado.

La imagen del Bernab¨¦u era tan desoladora que tan s¨®lo se o¨ªan los gritos de un reducido grupo de ultras sur y los ladridos de un perro polic¨ªa situado en el c¨®rner derecho del fondor sur.

Eso s¨ª, los pocos que estuvieron mantuvieron algunos de los ritos de los ¨²ltimos partidos: pitos a Panucci en los proleg¨®menos del encuentro y protestas a Iv¨¢n Campo cuando entr¨® en el terreno de juego despu¨¦s del descanso en sustituci¨®n de Fernando Hierro. En el medio tiempo algunos de los espectadores tambi¨¦n insistieron en sus protestas hacia el palco y fueron algunos los que se volvieron con pa?uelos para mostrar su descontento a la junta directiva.

Lorenzo Sanz y sus colaboradores estaban preocupados por la reacci¨®n del p¨²blico anoche, pero el p¨²blico no acudi¨® a la grada. Y eso que desde algunas instancias del club se facilitaron 400 entradas a un colegio que hicieron las delicias de un grupo de chavales que tuvieron as¨ª la oportunidad de conocer el estadio Bernab¨¦u.

La presencia de Hiddink pas¨® tan inadvertida -estuvo casi todo el tiempo sentado sin moverse en el banquillo- como la pancarta situada en uno de los c¨®rneres: "Capello cabr¨®n, el Madrid te quiere un mont¨®n".

Sobre Toshack, ni una palabra.