Entorno negativo

Los mercados de valores siguen fiando su trayectoria al corto plazo, actitud que explica sobradamente la enorme volatilidad actual y que define un futuro lleno de incertidumbre.

Nueva York se ha convertido en la pieza clave de este rompecabezas, aunque en s¨ª mismo tampoco cuenta con una situaci¨®n merecedora de confianza.

Los ¨²ltimos bandazos de esa Bolsa, con repetidas oscilaciones de m¨¢s de 200 puntos en una sola sesi¨®n, indican una acumulaci¨®n de tensiones fuera de lo habitual y los l¨®gicos movimientos de defensa por parte de los inversores, lo que se ha traducido en un incremento notable de las posiciones vendedoras.

El entorno econ¨®mico, tomado globalmente, empuja a la prudencia, sobre todo despu¨¦s de las advertencias lanzadas a Jap¨®n sobre la calidad y puntualidad de las actuaciones del banco central, la situaci¨®n de las reservas de divisas de Brasil, la evoluci¨®n de la salud del presidente ruso y la trayectoria de la econom¨ªa en la UE.

Con estas premisas, los mercados de deuda marcaron ayer la pauta a las bolsas, y lo hicieron apuntando hacia abajo, es decir, mediante la venta masiva de t¨ªtulos y una ca¨ªda de precios que apunta a nuevas tensiones en los tipos de inter¨¦s.

La deuda espa?ola a 10 a?os perdi¨® m¨¢s de un punto en el mercado secundario y la rentabilidad subi¨® hasta el 4,31%, 13 cent¨¦simas m¨¢s que el viernes, al tiempo que el diferencial con Alemania sub¨ªa hasta 0, 21 puntos.

Nueva York logr¨® dar la vuelta a la tendencia a la baja inicial y cerr¨® la sesi¨®n con un peque?o avance de 18, 20 puntos (0,20%), en el ¨ªndice Dow Jones, que qued¨® en 9.324, 78.