La proclama de Bot¨ªn
Emilio Bot¨ªn ten¨ªa un cuarto de hora, estrictamente minutado por su organizaci¨®n, para dirigirse a los 1.500 directivos del nuevo BSCH que acudieron ayer a recibir doctrina a la convenci¨®n de Madrid -previa a las juntas de hoy- y no desaprovech¨® ni un segundo. Salt¨® raudo hacia el atril desde el que hab¨ªan intervenido previamente el copresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Amus¨¢tegui y los vicepresidentes ?ngel Corc¨®stegui y Mat¨ªas Rodr¨ªguez Inciarte y, para empezar, se salt¨® el discurso que llevaba escrito. Le pareci¨® conveniente al banquero c¨¢ntabro apelar al general y fil¨®sofo chino Sun Tzu para arengar al auditorio antes de someterse al gui¨®n oficial. Y el personal dio un respingo en sus asientos y supo, si todav¨ªa no se hab¨ªa dado cuenta, que pertenece a un banco que quiere comerse el mundo. "El que ocupa en primer lugar la posici¨®n est¨¢ fortalecido, el que llega m¨¢s tarde y se precipita est¨¢ debilitado", dijo Bot¨ªn parafraseando al pensador/guerrero oriental que tan de moda est¨¢ en el mundo de las finanzas.Bot¨ªn, que no dejaba de balancearse, acudi¨® entonces a los papeles, pero sigui¨® en el mismo tono de proclama: "?Se han dado cuenta de lo que significa que en 45 d¨ªas hayamos puesto en pie uno de los primeros bancos europeos? En mes y medio hemos conseguido lo que en otras fusiones, y no hablo s¨®lo de Espa?a, han tardado a?os". Habl¨® primero del BCH -nobleza obliga- y de su experiencia en fusiones; de Banesto, por el que apost¨® abiertamente ("avanzar¨¢ conjuntamente sin perder identidad") para despejar dudas y rumores sobre una posible venta y alab¨® a Alfredo S¨¢enz por haber conseguido resucitar a un banco "en quiebra econ¨®mica y moral", y, por supuesto habl¨® del Santander, del que resalt¨® "su crecimiento ininterrumpido", sobre todo en Latinoam¨¦rica. Su hija mayor, Ana Patricia, que ya no es directiva, estuvo ausente y no oy¨® estas palabras que tan cerca le tocaban.
Aliento no falt¨®, pero advertencias tampoco. Palabras como "imbatibles" y "l¨ªderes" se sucedieron; pero tambi¨¦n "lucha" y "esfuerzo" ("Nadie nos va a regalar nada" y "el ¨¦xito no nos va llover del cielo") y por si acaso anunci¨® que visitar¨¢ las oficinas a ver qu¨¦ pasa. Aviso a navegantes.
Fue tambi¨¦n, como no pod¨ªa ser menos, una ma?ana de piropos de todos para todos. Jos¨¦ Mar¨ªa Amus¨¢tegui, que inaugur¨® el encuentro, abri¨® el fuego y, durante un cuarto de hora que control¨® rigurosamente, ya adelant¨® las excelencias que se suelen decir en este tipo de reuniones, a la que esta vez se invit¨® a la prensa. Y a los sindicatos, que acaban de firmar un acuerdo para asegurar que no habr¨¢ bajas traum¨¢ticas en tres a?os y medio.
A las 12 en punto acabaron los discursos. Los m¨¢s de 100.000 empleados (de Espa?a y del exterior) del primer banco espa?ol, que recibir¨¢ hoy el bautismo definitivo en las juntas paralelas de Madrid y Santander, hab¨ªan recibido la consigna oficial. El mensaje, muy probablemente, no tardar¨ªa en llegar a los despachos de su principal rival, el BBV, presente en la mente de todos.
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