El PP pregunta a Molins por un cr¨¦dito oficial a su hermano

Demasiado tarde. El fuego del caso Piqu¨¦ se extendi¨® ayer a la casa vecina de CiU. Los convergentes hab¨ªan asegurado que no entrar¨ªan en los negocios del ministro portavoz del Gobierno de Aznar. Y as¨ª lo hicieron. Pero unas palabras del candidato de CiU a la alcald¨ªa de Barcelona, Joaquim Molins, afirmando que "sentir¨ªa verg¨¹enza de ser diputado del PP" en Catalu?a atizaron las brasas. Y el presidente del Grupo Popular en el Parlament, Josep Curto, sac¨® a relucir que Molins fue un "mal consejero" y revel¨® que el Instituto Catal¨¢n de Finanzas concedi¨® en 1993 un cr¨¦dito de 120 millones de pesetas y un aval de 80 millones a Escofet, una empresa de la que era consejero Joan Molins, hermano del ex consejero de Pol¨ªtica Territorial.

"Lo m¨¢s importante es la transparencia y no aprovecharse de los cargos para que se beneficien empresas con familiares de los pol¨ªticos", afirm¨® Josep Curto. El presidente del Grupo Popular, que en la anterior legislatura destac¨® por su labor de fiscalizaci¨®n de los cr¨¦ditos y avales concedidos por el Instituto Catal¨¢n de Finanzas (ICF), explic¨® que el 5 de noviembre de 1993 la Generalitat concedi¨® un aval de 80 millones de pesetas y un cr¨¦dito de 120 millones a la empresa Escofet 1886, SA, de la que era vocal y consejero Joan Molins Amat, hermano del ex consejero. Curto a?adi¨® que la familia Portabella Al¨®s ten¨ªa el 6,60% de las acciones de esta empresa. Josep Maria Portabella Al¨®s "era y es" interventor general de la Generalitat. Joaquim Molins, que ocup¨® los departamentos de Comercio, Consumo y Turismo, y de Pol¨ªtica Territorial y Obras P¨²blicas, dej¨® el Gobierno de la Generalitat el 6 de junio de 1993 para pasar a ocupar despu¨¦s un esca?o en el Congreso de los Diputados. Es decir, que dej¨® el cargo de consejero cinco meses antes de la concesi¨®n de cr¨¦dito. En aquella ocasi¨®n, Curto no denunci¨® que el alcaldable de CiU tuviera v¨ªnculos familiares con la empresa beneficiaria del cr¨¦dito y el aval. S¨ª consider¨® que no se ajustaba a ley el hecho de que el interventor general de la Generalitat fuera consejero de la empresa hasta que dimiti¨®, 11 d¨ªas despu¨¦s de que se hubiera aprobado la operaci¨®n. Ahora, sin embargo, el clima pol¨ªtico recomienda que se desentierre el hacha de guerra. Y el PP quiso pagar ayer con la misma moneda que lo est¨¢ haciendo CiU con el ministro portavoz del Gobierno, Josep Piqu¨¦. Curto, que ayer exigi¨® a Molins explicaciones por estos hechos, quiso responder as¨ª a las declaraciones que por la ma?ana realiz¨® el candidato de CiU a la alcald¨ªa de Barcelona, quien afirm¨® que le dar¨ªa "verg¨¹enza" ser diputado del PP por el comportamiento que han tenido en el Parlament. Molins sugiri¨® que el voto de castigo ejercido por el Grupo Popular el pasado martes en el Parlament era fruto no de convicciones, sino de instrucciones. Ese d¨ªa los populares dejaron en minor¨ªa a CiU con motivo de la llamada guerra de los geri¨¢tricos. "La verg¨¹enza no es ser un pol¨ªtico catal¨¢n del PP, sino que la verg¨¹enza es ser un mal consejero y un mal gestor p¨²blico", afirm¨® ayer Curto. El diputado del PP agreg¨® que Joaquim Molins "tuvo que dejar la pol¨ªtica catalana por su falta de oficio en los debates de pol¨ªtica territorial, sobre el trasvase del Ebro y en el de los vertederos de residuos industriales en la Conca de Barber¨¤, lo cual provoc¨® un conflicto social y pol¨ªtico de consecuencias irreparables". El rifirrafe entre el PP y CiU se produce en v¨ªsperas de que el Parlament discuta la decimosexta reprobaci¨®n contra un consejero de la Generalitat. En este caso se trata del titular de Trabajo, Ignasi Farreres. Anteayer, el propio secretario general de CDC, Pere Esteve, aseguraba que CiU no iba a dejarse arrastrar "por un estilo de acoso y derribo que recuerda el de 1995", utilizado por el PP con respecto al ¨²ltimo Gobierno socialista de Felipe Gonz¨¢lez. Ahora todo parece estar en el aire.