Pantani inflama la Mil¨¢n-San Remo

Marco Pantani, el escalador, se inflam¨®, dej¨® volar su coraz¨®n y sus piernas siguieron. Fue en La Cipressa, nombre sonoro de la Mil¨¢n-San Remo (ayer, su 90? edici¨®n), pero cuesta pocas veces decisiva. Pantani, el genio, intentaba un imposible, pero Michele Bartoli, el celoso n¨²mero uno mundial, no quiso dejarle respirar. Sigui¨¦ndole, atrap¨¢ndole, dej¨¢ndose llevar por los impulsos de El Pirata, Bartoli, el corredor que quiz¨¢s m¨¢s merece venecer en la carrera m¨¢s f¨¢cil de correr y m¨¢s dif¨ªcil de ganar, perdi¨® la cabeza y la victoria. Fue un gesto de soberbia inmadura. Llegado, 10 kil¨®metros m¨¢s tarde, El Poggio, el otro punto de renombre antes de la meta en Via Roma, ni Bartoli, ni Pantani, ni los otros seis que tras ellos se hab¨ªan embarcado, tuvieron fuelle para intentar un segundo vuelo. Tampoco lo tuvieron Rebellin, Boogerd y Vandenbroucke, los considerados favoritos. Laurent Jalabert, ¨¦l, no tuvo derecho a mostrar que no pod¨ªa: un problema respiratorio le dej¨® fuera de juego cuando el ataque de Pantani. Todos, capturados. Todos, condenados al sprint.Triste destino el de Gabriele Colombo, el arc¨¢ngel varesino, condenado de por vida a demostrar que su triunfo en la San Remo de 1996 no fue un golpe de suerte. Demarr¨® ante el Santuario della Guardia, subi¨® los 3,7 kil¨®metros del Poggio en 6.02m, a 37 por hora, baj¨® solo. Le sobraron 1.200 metros. Zabel ya hab¨ªa tomado posiciones. El alem¨¢n, ganador los dos ¨²ltimos a?os, se preparaba para convertirse en el primero de la historia que ganara la Classicissima tres veces seguidas. Era el m¨¢s fuerte para el sprint y lo iba a demostrar. Lo demostr¨®, pero s¨®lo sprint¨® para la segunda plaza. 600 metros antes de la meta hab¨ªa saltado Andr¨¦i Tchmil, el viejo soldado trotamundos. El belga nacido moldavo, con nacionalidad ucrania antes y residente en Italia lograba, a los 36 a?os, con su estilo de toda la vida, su tercer triunfo en un monumento. Antes, en 1994 y 1997 hab¨ªan ca¨ªdo la Par¨ªs-Roubaix y la Par¨ªs-Tours.

Tchmil, como Zabel y Jalabert, tuvo una noche agitada. A las 4.30 de la ma?ana los comisarios de la UCI sacaron de la cama a todos los componentes del Telekom, Lotto, ONCE y Festina para someterlos a an¨¢lisis de sangre. Ninguno pas¨® el l¨ªmite de 50% de hematocrito.