El protagonismo de lord Nico

Lord Nicholas Browne-Wilkinson fue el maestro de ceremonias de las doce sesiones del juicio sobre la inmunidad. Entre bromas y veras, hizo una pregunta y una afirmaci¨®n, muy repetida. La primera: "?Qu¨¦ es un delito internacional?". Su segunda reacci¨®n frecuente: "I?m puzzled", que significa "estoy desconcertado". Ayer, lord Nico, como se le llama, se super¨® con creces.Al terminar los siete jueces lores de exponer, tras diez minutos, a las 2:20, hora local, en la soberbia C¨¢mara de los lores, el p¨²blico no reaccion¨®. Este apoya la inmunidad; el otro dice que tiene t¨ªtulo para ella, pero que la ha perdido desde finales de 1988, y as¨ª de seguido hasta contar hasta siete jueces lores. Pero todo el mundo sali¨® contento: la defensa de Pinochet porque considera el caso vaciado; la Fiscal¨ªa y las organizaciones de derechos humanos porque Pinochet tendr¨¢ que someterse a un proceso de extradici¨®n. Nadie estaba triste, todos con sonrisa de oreja a oreja. Una mujer no pod¨ªa contener su emoci¨®n. Sheila Cassidy, ciudadana brit¨¢nica, m¨¦dico, fue torturada en Chile en 1976. Dijo que hab¨ªa una noticia buena, que al menos habr¨¢ justicia para uno, dos, tres o cuatro torturados como ella. Y que hab¨ªa una mala, por la cual los familiares de la mayor parte de las v¨ªctimas han sido dejados en la estacada.

Lord Nico, seg¨²n pone por escrito, dice que "ninguna de las conductas alegadas ha sido cometida por o contra ciudadanos del Reino Unido". Sheila Cassidy no est¨¢ en el auto del juez Garz¨®n, pero es un caso internacional; William Beausire, desaparecido en 1975 tampoco estaba en el citado auto, pero es conocido en el Reino Unido. El tercero fue William Woodward, brit¨¢nico, sacerdote detenido en Valpara¨ªso tras el golpe de Pinochet y asesinado despu¨¦s. Ese s¨ª que est¨¢ en la solicitud espa?ola de extradici¨®n

Pero Browne-Wilkinson liquida la cuesti¨®n de los asesinados en Chile sin siquiera fundamentarlo. "En relaci¨®n con las acusaciones de asesinato y conspiraci¨®n para el asesinato, nadie ha avanzado ninguna raz¨®n de por qu¨¦ las normas ordinarias de inmunidad no pueden ser aplicadas y el senador Pinochet tiene derecho a la inmunidad". Se dice pronto.