Los aliados han destruido instalaciones, pero no han parado a las tropas serbias
Tras 13 d¨ªas de ataques a¨¦reos, la OTAN ha demostrado su capacidad para destruir instalaciones fijas de todo tipo, pero hasta ahora ha sido incapaz de da?ar de forma significativa a las tropas que Slobodan Milosevic utiliza en Kosovo para llevar a cabo la limpieza ¨¦tnica. Eso quiz¨¢ no ser¨ªa un problema en una guerra de largo aliento, pero ha colocado a la Alianza en el ojo del hurac¨¢n porque hasta ahora ha fracaso en su principal objetivo: acabar con la represi¨®n que sufren los albanokosovares y detener su ¨¦xodo.
La Alianza ha dise?ado una guerra limpia con la intenci¨®n de provocar el menor n¨²mero posible de bajas entre los dos contendientes, aliados por un lado, serbios por el otro. Una estrategia que ha permitido que la OTAN no haya padecido ni una sola muerte -s¨®lo ha perdido un avi¨®n y tres soldados han sido capturados, pero no en la zona de los ataques, sino en una patrulla fronteriza de rutina- y que, seg¨²n todos los indicios, ha provocado muy pocas bajas entre la poblaci¨®n serbia. La otra cara de la moneda son los cientos de miles de refugiados albanokosovares y los quiz¨¢ cientos, quiz¨¢ miles, de ejecutados por los paramilitares, el Ej¨¦rcito y la polic¨ªa especial de Milosevic.En los primeros d¨ªas de ataques, la Alianza se concentr¨® en la destrucci¨®n de las defensas antia¨¦reas serbias. El objetivo de esos ataques -basados en el lanzamiento de misiles y bombas dirigidas tanto desde los barcos fondeados en el Adri¨¢tico como desde los aviones que cada noche vuelan a Yugoslavia desde la costa italiana- era reducir las bater¨ªas serbias y permitir la entrada en acci¨®n de aviones de combate y helic¨®pteros para atacar directamente a las tropas serbias.
La Alianza confiaba en que los ataques a¨¦reos o bien iban a provocar la rendici¨®n de Milosevic o bien iban a abrir el paso con rapidez a los ataques sobre el terreno. No se ha cumplido ninguna de esas dos expectativas hasta el momento. La llegada de los helic¨®pteros estadounidenses Apache hace pensar que el mando militar aliado cree que las cosas est¨¢n ya mejor desde el punto de vista estrat¨¦gico y va a poder atacar a las columnas de carros de combate utilizados por los serbios para rodear los pueblos kosovares y forzar a sus pobladores al exilio.
En los primeros d¨ªas de ataques a¨¦reos, los aviones aliados han destruido plataformas lanzamisiles, bater¨ªas, centros de telecomunicaciones, radares, aeropuertos, dep¨®sitos de gasolina y municiones y centros de mando y control (cuarteles del Ej¨¦rcito y de la polic¨ªa especial). Los ataques se centraron en los alrededores de Belgrado y en Kosovo.
Poco a poco, las ofensivas se han ido ampliando a nudos de comunicaciones (intentando dificultar el transporte de tropas hacia Kosovo, pero tambi¨¦n cortando los accesos a Belgrado desde el norte) y se han vivido los primeros ataques en el centro de la capital. La destrucci¨®n de la sede la polic¨ªa especial serbia ha sido el golpe m¨¢s espectacular, aunque algunos dudan de la eficacia de demoler un edificio que se sabe que ha sido ya abandonado por sus moradores.
Desde el domingo por la noche el tiempo ha mejorado en los Balcanes y la Alianza quiere aprovechar esta semana para lanzar una gran ofensiva contra la artiller¨ªa serbia. "Muchos nos critican porque dicen que para cuando nosotros lleguemos Kosovo ya estar¨¢ vac¨ªo. Pero han de saber que si no estuvi¨¦ramos aqu¨ª quiz¨¢ quedar¨ªa vac¨ªo de albaneses para siempre, y con nosotros acabar¨¢n volviendo a sus casas todos los que han sido expulsados de ellas estos d¨ªas", opinan los portavoces de la OTAN.
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