La criminalidad en Andaluc¨ªa creci¨® en 1998 un promedio del 5,8%, seg¨²n la memoria del fiscal

El ¨ªndice de criminalidad durante 1998 aument¨® en Andaluc¨ªa un 5,8%, seg¨²n la memoria de la Fiscal¨ªa del TSJA. Las provincias de Almer¨ªa (con un 12%), Ja¨¦n y C¨¢diz (con un 10%) fueron las que experimentaron un mayor crecimiento relativo, si bien M¨¢laga, con 206.789 asuntos penales incoados, contin¨²a a la cabeza. Por contra, en Granada la criminalidad descendi¨® un 2,5%. En la memoria el fiscal lamenta las molestias que producen las concentraciones nocturnas callejeras y admite que se han detectado fallos en el programa inform¨¢tico para la elecci¨®n de los jurados populares.

En Almer¨ªa se incoaron 49.681 asuntos penales, un 12% m¨¢s que en el a?o precedente, lo que la convierte en la provincia donde creci¨® m¨¢s la criminalidad. El tipo m¨¢s frecuente, como casi en el resto de Andaluc¨ªa, es la delincuencia contra la propiedad, especialmente los robos con fuerza en las cosas y los delitos relacionados con el tr¨¢fico de drogas. Asimismo tuvieron un peso importante los asuntos vinculados con la inmigraci¨®n. C¨¢diz y Ja¨¦n duplicaron la media de criminalidad. En la primera de ellas se abrieron 24.813 diligencias previas por robo con fuerza, 14.434 por hurtos y 3.511 por robos violentos. La Fiscal¨ªa se queja en la memoria de las "carencias m¨²ltiples" que padece en la provincia gaditana, "entre ellas la atenci¨®n que no siempre se dispensa sobre la comarca de Gibraltar que merece una m¨¢s decidida soluci¨®n ante las necesidades personales y materiales". En t¨¦rminos absolutos, sin embargo, la primera provincia en n¨²mero de asuntos penales fue M¨¢laga, con 206.789, seguida por Sevilla, con 200.799. En ambas provincias el aumento fue de un 8% y un 5% respectivamente. En Granada, por contra, la memoria sostiene que el descenso de la criminalidad abre "una etapa firme de estabilidad en la lucha contra el delito". Movida Entre los comentarios que acompa?an a la memoria, el fiscal jefe Luis Portero alude un a?o m¨¢s a las molestias derivadas de las concentraciones nocturnas en las zonas de alterne. Por contra, el fiscal se felicita por la cooperaci¨®n prestada por los grupos ecologistas y la Administraci¨®n para perseguir los delitos contra el medio ambiente. En 1998 se recibieron y tramitaron en la Fiscal¨ªa 64 denuncias por infracciones contra el medio, de las cuales 59 proced¨ªan de organismos oficiales. Tambi¨¦n ha deca¨ªdo el n¨²mero de actuaciones emprendidas contra los basureros incontrolados. Respecto a los juicios con jurado, Luis Portero sostiene en su informe que la ley que es "imperfecta". "Ya no vale el argumento de que esta ley lleva un corto periodo de aplicaci¨®n; por muchos a?os que pasen seguir¨¢ siendo absurdo celebrar juicios con jurado por amenazas o allanamiento de morada, y con el paso del tiempo no mejorar¨¢ la desmedida regulaci¨®n que dicha ley tiene de los delitos conexos". Adem¨¢s, el fiscal admite que ha detectado "defectos en los programas inform¨¢ticos para la selecci¨®n de candidatos a formar parte de un jurado. As¨ª por ejemplo se selecciona en ocasiones a personas que ya han formado parte de alguno, fallo ¨¦ste que considero que ser¨¢ muy f¨¢cil de remediar". No obstante, el fiscal hace autocr¨ªtica y confiesa que "los fiscales no le damos la debida importancia" a la fase del juicio oral en que se recibe en audiencia a las partes. "El fiscal nunca puede ser un asistente pasivo de dicha diligencia, por el contrario ha de hacer una valoraci¨®n pormenorizada de la propuesta de veredicto". Portero tambi¨¦n reflexiona sobre la delincuencia juvenil. En el caso de Granada, el fiscal se?ala que el equipo t¨¦cnico de apoyo al juzgado de Menores, encargado de detectar las causas que llevan al joven a elegir una conducta an¨®mala, propuso 324 medidas, de las cuales 123 eran de archivo de las diligencias. En siete casos propuso que los menores reparan el da?o causado con actividades desinteresadas de beneficio comunitario, tales como participar en el arreglo de zonas da?adas, ayudar a asociaciones de inmigrantes o borrar pintadas callejeras.