Una santa rebelde

Quien tanto hab¨ªa suspirado por la muerte desde esos archiconocidos versos, "...Y tan alta vida espero, que muero porque no muero...", que resuenan en la mente de cualquiera, aunque no sea amante de rimas ni poetas, temi¨® su fin terrenal cuando lo sinti¨® cerca. Ese esp¨ªritu rebelde que presidi¨® toda la vida de Santa Teresa de Jes¨²s, una mujer del siglo XVI que vivi¨® enfrentada a su tiempo, es como un im¨¢n para Josefina Molina. La directora de cine, que hace 18 a?os realiz¨® una serie para Televisi¨®n Espa?ola sobre la vida de Teresa de Jes¨²s, ha vuelto sobre sus pasos y present¨® ayer en Sevilla una novela hist¨®rica sobre el viaje que la santa realiz¨® a la citada ciudad entre 1575 y 1576. En el umbral de la hoguera, que forma parte de la colecci¨®n de Novela hist¨®rica de Ediciones Mart¨ªnez Roca, se centra en los ¨²ltimos a?os de la vida de la escritora m¨ªstica, cuando tuvo que enfrentarse al tribunal de la Inquisici¨®n acusada de herej¨ªa. "He querido hacer una novela sencilla y directa, un libro que demuestra que todav¨ªa, a las puertas del siglo XXI, podemos aprovechar su experiencia", dijo ayer Josefina Molina, quien quiso presentar su libro en Sevilla, ciudad en la que transcurre la acci¨®n, y acompa?ada por la actriz Concha Velasco y la consejera de Cultura Carmen Calvo. "Yo la veo como una mujer que, a sus 60 a?os, contin¨²a siendo rebelde, decidida y diferente. Una mujer que se plantea si todo lo que ha hecho en la vida est¨¢ bien o mal", coment¨® Concha Velasco, quien encarn¨® a la santa de ?vila en la serie que dirigi¨® Josefina Molina. La actriz, entusiasmada con las pinceladas de misterio de la novela y ese amor en el alma y cuerpo se unen, lanz¨® ayer un reto: "Si yo tuviera dinero convertir¨ªa esta novela en la mejor pel¨ªcula que se ha realizado en Espa?a en los ¨²ltimos tiempos". "Me encanta, me parece que ser¨ªa una pel¨ªcula tan interesante como El nombre de la rosa", a?adi¨®. Sin embargo, Josefina Molina no parec¨ªa tan animada con la idea. "En principio es muy dif¨ªcil, aunque no digo que no definitivamente. Nosotros hicimos ya un trabajo con la serie que no es nada despreciable", contest¨® la realizadora. La consejera de Cultura, por su parte, prefiri¨® centrarse en el libro. "Es una obra de la que se puede uno fiar, porque todos los datos que incluye son rigurosos. Teresa de Jes¨²s lleg¨® a una Sevilla dif¨ªcil, en la que hab¨ªa 18 monasterios para varones y 24 conventos, y eso lo refleja muy bien Josefina Molina cuando dice: "Todos los buenos est¨¢n abatidos y los d¨ªscolos favorecidos y nadie toma el menor empe?o en merecer, sino en negociar", es una frase que, desgraciadamente, es eterna". La directora de cine, que en 1997 public¨® su primera novela Cuesti¨®n de azar, se preguntaba en voz alta: "?Qu¨¦ fibra del ser humano habr¨¢ tocado esta mujer para colarse en la mente de todo el mundo?, ?qu¨¦ la hace tan popular? Hay algo en su obra que trasciende el tiempo y las fronteras". "Hace unos meses estaba rodando en Las Ramblas de Barcelona un episodio de Esta es mi tierra dedicado a Ana Mar¨ªa Matute y, mientras esper¨¢bamos que llegara el equipo nos acercamos a uno de los kioscos en los que, junto a la prensa, hay revistas pornogr¨¢ficas y banderines del Bar?a. Al lado de novelas c¨®mo Sexo fatal o Mujeres calientes, estaba la vida y fundaciones escritos por Santa Teresa", explic¨® encantada del descubrimiento . "Me impact¨® el hecho de que 417 a?os despu¨¦s de su muerte, sus obras contin¨²en vendi¨¦ndose como si fueran un best seller. Ninguno de los que estamos creando ahora aspiramos a que nuestras obras est¨¦n dentro de cuatro siglos en los kioscos o lo que entonces los sustituya", agreg¨® la primera mujer que consigui¨® el t¨ªtulo de directora en la legendaria Escuela Oficial de Cinematograf¨ªa de Madrid. Josefina Molina ha narrado en su libro c¨®mo Teresa de Jes¨²s, que pas¨® su vida denunciando los intereses pol¨ªticos y los privilegios de la c¨²pula eclesi¨¢stica, vivi¨® sus ¨²ltimos a?os, los m¨¢s dif¨ªciles y en los que estuvo a un paso de arder en la hoguera o pudrirse en una c¨¢rcel.