Intervenci¨®n terrestre: la ¨²nica respuesta para Kosovo
Las evacuaciones a Guant¨¢namo, Alemania o Turqu¨ªa no suponen soluci¨®n alguna para el problema de los refugiados de Kosovo. Representan una negaci¨®n del problema fundamental, que es la guerra, que se est¨¢ perdiendo.El realojamiento en el extranjero significa colaborar con Slobodan Milosevic en la limpieza ¨¦tnica de Kosovo. Se ratifica su hecho consumado. La ¨²nica soluci¨®n aceptable para los refugiados es que se les escolte de vuelta a sus casas (a las que a¨²n sigan en pie) y se les proporcione la seguridad necesaria para reconstruir sus vidas.
Por tanto, la ¨²nica soluci¨®n es una victoria militar de la OTAN. Si la OTAN no vence a Serbia, ya no habr¨¢ una OTAN. Y ahora no cabe imaginar una victoria sin una campa?a en tierra. El debate sobre la intervenci¨®n ya no es una disputa sobre los medios para lograr un objetivo. Se trata de un debate sobre renunciar al derecho de la OTAN y EE UU a ejercer el liderazgo internacional.
Si Estados Unidos veta una intervenci¨®n terrestre, que se ve apoyada por la mayor¨ªa de la opini¨®n francesa y brit¨¢nica, Estados Unidos se puede olvidar de la OTAN. Los hechos acontecidos desde el 24 de marzo ya han minado la confianza en una seguridad colectiva en Europa, o en cualquier otra parte del mundo, garantizada por Estados Unidos.
Los sondeos efectuados los d¨ªas 1 y 2 de abril en Gran Breta?a sacaron como resultado que el 66% de los encuestados apoyan la participaci¨®n brit¨¢nica en un ataque terrestre de la OTAN contra las fuerzas serbias (un aumento del 19% en s¨®lo una semana). S¨®lo un 27% se opon¨ªa (y un 7% no ten¨ªa una idea clara). Una encuesta realizada el 3 de abril en Francia revel¨® que el 58% apoya una intervenci¨®n terrestre. En otra encuesta francesa, el 55% de los entrevistados apoyaron una intervenci¨®n francesa, incluso sin la OTAN.
La presi¨®n en contra de una intervenci¨®n terrestre procede fundamentalmente de Washington. La oposici¨®n en el Congreso es muy fuerte, aunque en Newsweek se afirma que el 54% de la opini¨®n p¨²blica estadounidense enviar¨ªa tropas "para ayudar a traer la paz". Los pol¨ªticos de Washington siguen viendo a Kosovo bajo el prisma distorsionado de la campa?a presidencial. Cada acto se pondera considerando los posibles efectos que pudiera tener sobre el electorado estadounidense. Y se ignora qu¨¦ efectos podr¨ªa tener una derrota en la opini¨®n que el mundo entero tiene de Estados Unidos.
Este aislamiento moral ya es caracter¨ªstico de Washington, y potencialmente resulta letal para los intereses nacionales estadounidenses. Se podr¨ªa discutir, y yo lo he hecho, que hay que acabar con esa dependencia patol¨®gica que Europa occidental tiene de Estados Unidos por el bien de ambas partes, pero sin duda no debe hacerse perdiendo la guerra a manos de Slobodan Milosevic.
Los planificadores de la OTAN no pueden haber ignorado la posibilidad de una intervenci¨®n. Las fuerzas existen. Las fuerzas a¨¦reas m¨®viles de Estados Unidos est¨¢n disponibles, como tambi¨¦n lo est¨¢n los regimientos a¨¦reos, formaciones de reacci¨®n r¨¢pida y fuerzas especiales brit¨¢nicas y francesas.
El general William Odem, que ahora trabaja en el Instituto Hudson, ha propuesto una ofensiva blindada desde Hungr¨ªa, que es un nuevo miembro de la OTAN, hacia Belgrado, para derrocar al gobierno de Milosevic. Pol¨ªticamente resulta comprometido, porque podr¨ªa poner en un aprieto a la minor¨ªa h¨²ngara de Serbia.
Sin embargo, Serbia y Kosovo juntos tienen una superficie inferior a la de Kentucky (unos 103.000 km2). Kosovo tiene el tama?o de todo el ¨¢rea de Los ?ngeles. Una columna de tanques lo puede cruzar en una hora.
Sin duda la OTAN se podr¨ªa enfrentar a las tropas y la polic¨ªa serbia, no s¨®lo mediante una invasi¨®n blindada desde el norte y mediante el ataque de las tropas de la OTAN que actualmente se encuentran en Macedonia, sino tambi¨¦n con un aterrizaje a¨¦reo, apoyado desde Albania (que se encuentra a menos de 144 km del centro de Kosovo) para lanzar operaciones en el centro del pa¨ªs y destruir las l¨ªneas de comunicaci¨®n serbias. Ha llegado la hora de actuar r¨¢pido e improvisar.
El cometido militar de la OTAN es sacar de Kosovo a las fuerzas organizadas serbias, destruirlas tanto a ellas como al actual gobierno serbio, y restaurar el orden y la autoridad en Kosovo. Se habla mucho del potencial de la guerrilla serbia, que es real. A pesar de ello, no hay raz¨®n aparente por la cual las fuerzas del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n de Kosovo (ELK), armadas y formadas nuevamente, no pudieran hacer desaparecer de las monta?as de Kosovo a los guerrilleros serbios. La OTAN no deber¨ªa intentar ocupar Serbia cuando su ej¨¦rcito ya est¨¦ destruido.
Las hip¨®tesis catastr¨®ficas que citan el ejemplo de Vietnam ignoran sistem¨¢ticamente el hecho de que las fuerzas de la OTAN operar¨ªan en Kosovo contra el odiado invasor serbio, con el apoyo de la poblaci¨®n y del ELK. En Vietnam, Estados Unidos apoy¨® a un gobierno al que la mayor¨ªa popular se opon¨ªa activa o pasivamente, frente a la oposici¨®n armada de la fuerza pol¨ªtico-militar m¨¢s din¨¢mica del pa¨ªs. Hay una diferencia.
Los kosovares quer¨ªan la libertad, y las t¨¢cticas del ELK precipitaron la crisis. Hasta ahora, los gobiernos occidentales han querido que Kosovo siga siendo parte de Serbia. Eso ya no es posible. Los Balcanes ya se encuentran profundamente desestabilizados.
La OTAN deber¨ªa apoyar la independencia de Kosovo con la esperanza de que finalmente se pudiera ratificar como parte de un acuerdo m¨¢s amplio de los Balcanes, negociado con los vecinos de Kosovo y un gobierno que suceda al actual de Belgrado, con la participaci¨®n rusa.
En el momento de escribir este art¨ªculo, la OTAN y EE UU siguen sustituyendo las opciones militares que podr¨ªan costar vidas de la OTAN por unos gestos paliativos pero moralmente hip¨®critas, como los transportes a¨¦reos y los realojamientos "temporales". Sin embargo, la muerte es parte del contrato militar. El antiguo comandante franc¨¦s en Bosnia, Philippe Morillon, ha afirmado lo siguiente de las im¨¢genes ficticias que Estados Unidos tiene sobre el tema: "?qu¨¦ clase de soldados son ¨¦sos que est¨¢n dispuestos a matar pero no a morir?".
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