Arrestado un polic¨ªa local de Olot por su presunta implicaci¨®n en una estafa
La mancha negra se extiende sobre la polic¨ªa local de Olot (Garrotxa). Dos de sus agentes -uno fallecido- participaron en el secuestro de la farmac¨¦utica Maria ?ngels Feliu. El martes, el cabo Josep Alonso fue suspendido de empleo tras confesar un robo. Ayer un cuarto agente fue detenido por la Guardia Civil por intervenci¨®n en una estafa millonaria a una aseguradora aprovech¨¢ndose de sus atribuciones policiales.
La Guardia Civil acusa al agente Manuel Bonsoms de falsear el atestado de un accidente de tr¨¢fico para lograr que la aseguradora desembolsara una cantidad que oscilar¨ªa entre los 30 y los 90 millones de pesetas y que pudo ser repartida entre el agente, un trabajador de la aseguradora y las personas involucradas en el siniestro. Al parecer, en el accidente se vio implicado un familiar del polic¨ªa. Los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil detuvieron ayer en Sant Pau de Seguries (Ripoll¨¨s) a Josep A. S., presunto c¨®mplice de la estafa. No descartaban que, a tenor de la declaraci¨®n del detenido, tambi¨¦n el polic¨ªa local de Olot pudiera ser detenido e interrogado. El accidente que se detallaba en el atestado datar¨ªa de hace unos dos a?os. El agente local investigado hace seis a?os que trabaja en el cuerpo y se encuentra de baja laboral. La investigaci¨®n que la Guardia Civil realiza sobre el cuerpo de la polic¨ªa de Olot se ha saldado, hasta el momento, con la detenci¨®n de los principales responsables del secuestro de la farmac¨¦utica, lo que ha permitido resolver la mayor¨ªa de los interrogantes del caso. Pese a que la alcaldesa de Olot, la convergente Pilar Brussosa, asegur¨® poco despu¨¦s de la detenci¨®n del polic¨ªa local Antonio Guirado, que el resto de los miembros de su polic¨ªa estaban libres de toda sospecha, la Guardia Civil ha continuado centrando sus pesquisas en los polic¨ªas olotenses y est¨¢n sacando a la luz trapos sucios de los agentes municipales. Hasta el momento, los nuevos delitos que han aflorado en la polic¨ªa local no tienen, en principio, relaci¨®n con el secuestro.
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