Salvem el Benacantil denuncia ante el TSJ el Palacio de Congresos

La legalidad o no de la decisi¨®n del PP de edificar el futuro Palacio de Congresos de Alicante en la ladera del monte Benacantil tendr¨¢ que ser resuelta finalmente por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana. La plataforma Salvem el Benacantil, que aglutina a diversos colectivos sociales alicantinos, ha optado por presentar un recurso contencioso-administrativo ante el TSJ por las presuntas irregularidades que, a su juicio, han rodeado el proceso, tanto en lo que se refiere a la adjudicaci¨®n del proyecto como al lugar elegido para su ubicaci¨®n, una zona protegida por la actual normativa. El equipo de gobierno municipal, en manos del PP con mayor¨ªa absoluta, y en contra de los informes de los t¨¦cnicos de la corporaci¨®n, aprobar¨¢ en el pleno de ma?ana, martes, la construcci¨®n del Palacio de Congresos en las faldas del monte Benacantil, que corona el castillo de Santa B¨¢rbara. Los t¨¦cnicos, en su informe, se?alan que la construcci¨®n de las instalaciones congresuales en la ladera del Benacantil conllevar¨¢ problemas de tr¨¢fico rodado y de aparcamiento, aparte de su negativo impacto visual y de que su uso no es compatible con un parque urbano. "El PP quiere despedirse a lo grande, sin tener en cuenta no ya la oposici¨®n de los vecinos, sino ni tan siquiera las de los t¨¦cnicos", dijo ayer Francisco Huesca, portavoz de la plataforma. "Al final no nos queda m¨¢s remedio que acudir a esta v¨ªa porque, con independencia de las cuestiones ambientales, hay muchas sombras en todo el proceso", a?adi¨®. Este colectivo vecinal s¨ª que ha conseguido, al menos, que sus representantes intervengan en el pleno del martes para defender su postura: "As¨ª nos lo ha transmitido el concejal de Urbanismo", precis¨® Huesca. "No obstante, al parecer el PP quiere equilibrar el debate y tambi¨¦n dar¨¢ la palabra al presidente de la Asociaci¨®n Coraz¨®n de Alicante . Esto, que es leg¨ªtimo desde del punto de vista democr¨¢tico, nos huele a burda maniobra pol¨ªtica", concluy¨® Huesca.