Estudiantes se limita a rematar la faena

Hay equipos que dependen demasiado de quien les gobierna en la pista. Y el d¨ªa que ¨¦ste falta, el naufragio se ve venir. El Tau se jug¨® la vida ante Estudiantes sin Bennet, sin su director de escena, y la perdi¨® tras interpretar una funci¨®n penosa. Empez¨® hu¨¦rfano y acab¨® sin vida. La noticia, sin embargo, es que Estudiantes se clasific¨®, lo que nadie pareci¨® dudar desde que se supo que el americano no estar¨ªa. El Tau se mostr¨® serio en defensa pero indigno en ataque, all¨ª donde Bennet le ilumina. El apag¨®n, as¨ª, fue total.El partido, da?ino para cualquier espectador objetivo, mostr¨® a un Estudiantes que no hizo nada para ganar, pero que se encontr¨® con un rival que lo hizo todo para perder. Excusas tiene el Tau, por supuesto, que nunca se sabe lo que le hubiera ocurrido de estar entero. O quiz¨¢ s¨ª se sepa, porque si a Estudiantes se le ocurre actuar as¨ª con Bennet en pista nadie le librar¨ªa del quinto partido. Pero el resultado final est¨¢ m¨¢s all¨¢ de esas conjeturas. La obligaci¨®n de Estudiantes era ganar y gan¨®. Su disminuido rival resisti¨® algo m¨¢s de 20 minutos. Lleg¨® entero al descanso (31-30) porque su defensa en zona se le atragant¨® a Estudiantes, que no dominaba los tableros y que se perd¨ªa en una incomprensible precipitaci¨®n, viviendo como viv¨ªa en una situaci¨®n de privilegio. Pero el caos vitoriano se agigant¨® tras el descanso. La insistencia de Beric en el error fue contagiosa y el Tau no fue capaz de conseguir m¨¢s que 6 puntos en 10 minutos. Scariolo puso de base a Lucio Angulo, un tipo de dos metros, y Gonzalo Mart¨ªnez, de 1,78, se lo pas¨® de vicio. Crecieron las diferencias y los triples de Espil llegaron cuando ya no serv¨ªan de nada. Estudiantes remat¨® la faena, que era al fin y al cabo de lo que se trataba, y atrap¨® la gloria tras un partido de pinta indecente, en el que venci¨® porque no le quedaba m¨¢s remedio.