La reforma laboral logra dos millones de contratos, pero la tasa de temporalidad no cede

La reforma laboral cumple hoy dos a?os, con un balance de dos millones de contratos indefinidos, una cifra sensiblemente superior a los 721.400 logrados entre 1995 y 1996. Desde que entr¨® en vigor el pacto de los sindicatos y la patronal, m¨¢s de 700.000 trabajadores temporales han pasado a fijos. Esos datos positivos contrastan con una tasa de temporalidad que se resiste a bajar, y que tan s¨®lo se ha movido del 33,6% al 32,5% del total de asalariados. Tampoco se ha puesto remedio a la rotaci¨®n de trabajadores, y los contratos eventuales tienen cada vez menos duraci¨®n.

La apuesta por la estabilidad de la contrataci¨®n que hace dos a?os realizaron la patronal CEOE y los sindicatos CCOO y UGT ha permitido que los empresarios pierdan el miedo a la contrataci¨®n fija, pero est¨¢n actuando con mucha cautela, y animados, sin duda, por una figura de contratos estables a los que se redujo entre el 40% y el 50% sus cotizaciones a la Seguridad Social y se les dot¨® de m¨¢s facilidades en el despido.Desde el 17 de mayo de 1997 hasta el momento, y seg¨²n los datos provisionales del Ministerio de Trabajo, los contratos fijos realizados han sido 2.011.741, del total de 22.912.785 colocaciones registradas en el Inem, lo que supone un 8,78%, y los temporales ascienden a 20.901.044. En los dos a?os anteriores (1995 y 1996) se hicieron 721.400 contratos indefinidos, un 4,52% de las 15.957.600 colocaciones totales, porcentaje que se mantuvo en los siete a?os anteriores a la reforma y oscil¨® del 3% al 5%.

Los contratos fijos directamente acogidos a la reforma han sido 1.344.071, de los que 603.726 son iniciales indefinidos, y 704.345, transformaciones de temporales en fijos, seg¨²n las cifras de Trabajo. Los datos de CCOO son muy similares y reflejan 1.317.399 contratos fijos vinculados a los acuerdos de 1997, de los que 720.233 corresponden a eventuales que han pasado a fijos y 587.484 indefinidos desde el principio.

Los j¨®venes son los que m¨¢s se han beneficiado de la conversi¨®n de contratos temporales a fijos, y el 54,5% corresponde a personas entre los 16 y los 30 a?os de edad. Tambi¨¦n ha habido una parte importante que son transformaciones del desaparecido contrato para el lanzamiento de nueva actividad y, en concreto, han sido 178.409 los que han pasado a indefinidos.

Aumento de empleos fijos

En ese periodo, la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) refleja que el n¨²mero de trabajadores ocupados pas¨® de 12.576.400 (primer trimestre de 1997) a 13.342.100 (dato de finales de 1998, ¨²ltimo disponible); los parados, de 3.442.400 a 2.963.400, y la tasa de paro, del 21,49% al 18,17%. El total de contratados fijos aument¨® de 6.297.900 a 6.951.200, y los temporales, de 3.189.990 a 3.348.700. Eso supone que hay un incremento de 653.300 indefinidos, frente a un aumento de 158.710 temporales. En suma, del nuevo empleo creado, el 80% son puestos fijos.

Sin embargo, la tasa de temporalidad (eventuales respecto al total de asalariados) ha bajado tan s¨®lo en algo m¨¢s de un punto y ha pasado del 33,6% al 32,5%, debido al elevad¨ªsimo volumen inicial de temporales. La evoluci¨®n ha sido negativa en el sector p¨²blico, y su tasa ha aumentado en 3,1 puntos (pasa del 15,6% al 18,7%), mientras que en el privado ha bajado tres puntos (del 39,2% al 36,2%). Para C¨¢ndido M¨¦ndez, secretario general de UGT, hay "elementos positivos en la aplicaci¨®n del acuerdo porque se ha generado empleo fijo, cuando en la etapa anterior s¨®lo se destru¨ªa". Aunque no en la Administraci¨®n p¨²blica, donde se ha producido un aumento de la precariedad, "por la pol¨ªtica absurda de empleo que se aplica, ya que necesitan trabajadores, pero recurren a la contrataci¨®n eventual por el cors¨¦ que imponen los Presupuestos Generales". Otro factor que considera preocupante es el aumento de la rotaci¨®n de trabajadores y los contratos temporales cada vez tienen una duraci¨®n menor.

El dirigente ugetista cree que "el acuerdo est¨¢ funcionando, pero el balance se ensombrece porque los empresarios de algunos sectores siguen considerando la precariedad como la regla, y la estabilidad, como la excepci¨®n".

La secretaria de empleo de CCOO, Lola Liceras, coincide en que hay una aplicaci¨®n desigual, y la estabilidad est¨¢ mejorando en Catalu?a y Madrid y en los sectores de la industria y los servicios, mientras que est¨¢ funcionando mal en Andaluc¨ªa y Castilla-La Mancha, en la Administraci¨®n p¨²blica, y "el gran problema" est¨¢ en la construcci¨®n. En su criterio, a este sector "hay que darle un tratamiento aparte, ya que las subcontratas, la econom¨ªa sumergida y los falsos aut¨®nomos" son el origen de una temporalidad que est¨¢ 44 puntos por encima de la media de la Uni¨®n Europea.

Nuevos comportamientos

Para la dirigente de CCOO, en l¨ªneas generales, en estos dos a?os se ha producido "una inflexi¨®n respecto a la etapa anterior, que era insoportable, y s¨®lo crec¨ªa el empleo temporal y hab¨ªa destrucci¨®n de empleo indefinido, con sustituci¨®n de trabajadores fijos en las plantillas". Ahora se han empezado a cambiar los comportamientos empresariales.

Toni Ferrer, secretario de acci¨®n sindical de UGT, cree que "el balance prefigura una situaci¨®n contradictoria, con avances en la estabilidad del empleo, la persistencia de una elevada temporalidad y pocas variaciones en la modificaci¨®n de la estructura de la negociaci¨®n colectiva". En la cobertura de vac¨ªos s¨ª se ha logrado un acuerdo para la extensi¨®n de convenios a los subsectores que no los tienen, y que se ha recogido en una norma que ya est¨¢ en tr¨¢mite parlamentario.

El an¨¢lisis que hace el sector cr¨ªtico de CCOO sobre el pacto es m¨¢s negativo. En un informe dice que "los datos reflejan que, a pesar de las ventajas del nuevo contrato (exenciones en las cuotas de Seguridad Social y despido m¨¢s barato), y de los miles de millones gastados del presupuesto del Inem, el acuerdo no ha servido, en una ¨¦poca de crecimiento econ¨®mico muy importante, ni para crear empleo suficiente (seguimos a la cabeza de Europa en paro) ni para reducir significativamente la precariedad, objetivo fundamental".

Tambi¨¦n argumenta que "la pr¨¢ctica totalidad de contratos celebrados se centran en las modalidades temporales de obra o servicio, eventual por circunstancias de la producci¨®n y tiempo parcial. Todos ellos permiten una gran disponibilidad por parte del empresario y una gran dificultad de controlar las irregularidades. Sobre todo si tenemos en cuenta que incluyen los contratos celebrados por las empresas de trabajo temporal (ETT)".