Un mapa para evitar la ceguera

A la vejez, viruela, se dec¨ªa antes. Hoy, en cambio, es m¨¢s com¨²n quedarse ciego. Un 12% de los ancianos andaluces puede llegar a perder la visi¨®n si a partir de los 65 a?os no se hacen revisiones peri¨®dicas oculares; lo normal es que se hagan cada seis meses. La diabetes y la degeneraci¨®n progresiva de los tejidos del ojo, son las principales causas de este aumento de cegueras. Los expertos calculan que la demanda asistencial por problemas en los ojos se acerca ya al 20% del total de la asistencia sanitaria. As¨ª las cosas, el Servicio de Oftalmolog¨ªa del Hospital Virgen Macarena de Sevilla, en su Secci¨®n de Exploraciones Especiales, ha encontrado el remedio para, al menos, paliar y contener este aumento progresivo en la p¨¦rdida de visi¨®n de los ancianos. M¨¢s de cuatro a?os ha necesitado el oftalm¨®logo Eduardo Esteban Gonz¨¢lez para convencer a la administraci¨®n del hospital de la urgencia de contar con un angi¨®grafo digital, el primero que hay de estas caracter¨ªsticas en la Sanidad P¨²blica andaluza. Este aparato, mediante un programa inform¨¢tico, fotograf¨ªa, almacena y analiza el comportamiento vascular del fondo de ojo en su totalidad, es decir, estudia sus tres partes: la retina, el nervio ¨®ptico y la coroides. El angi¨®grafo permite conocer y controlar, al mil¨ªmetro, todas las patolog¨ªas retinianas; en especial el comportamiento vascular. "No se olvide que el ojo", comenta Esteban Gonz¨¢lez, "es la parte del organismo qu¨¦ m¨¢s sangre recibe por unidad de tiempo; m¨¢s incluso que el coraz¨®n". Por lo tanto, la observaci¨®n con todo detalle del funcionamiento de los vasos sangu¨ªneos de la retina permite un diagn¨®stico preciso de su deterioro y su posterior tratamiento con l¨¢ser. La diabetes representa el 50% de las consultas en Exploraciones Especiales. En segundo lugar est¨¢ la degeneraci¨®n de la m¨¢cula (la zona de la retina en donde se da la agudeza visual), cuyos s¨ªntomas son la p¨¦rdida de la visi¨®n fina: cuando se emborronan las im¨¢genes. Hoy se desconocen todav¨ªa las causas de esta degeneraci¨®n. "El problema es que si no se trata a tiempo esta patolog¨ªa", explica Gonz¨¢lez, "el resultado final es la ceguera. Y un 12% de los ancianos andaluces la padecen". Con el angi¨®grafo se estudian tambi¨¦n la hipertensi¨®n ocular, los tumores y la inflamaci¨®n, la patolog¨ªa de coroides y del nervio ¨®ptico. La absoluta precisi¨®n de esta m¨¢quina y las m¨²ltiples funciones que desempe?a, le permitir¨¢n al Hospital Macarena, a pesar de los nueve millones de pesetas que ha invertido en su instalaci¨®n, amortizarla en un par de a?os. S¨®lo los an¨¢lisis cl¨ªnicos que se evitan con ella suponen una ahorro de 3,5 millones anuales. Adem¨¢s, con una sola prueba puede realizarse el diagn¨®stico e inmediatamente despu¨¦s iniciarse el tratamiento. Los historiales cl¨ªnicos, con im¨¢genes en color incluidas, se almacenan en compactos; en cada uno de estos discos caben 70 pacientes. Ram¨®n Medina, diab¨¦tico, llega a la consulta asustado; se le ve. Es la primera vez que viene. "Un peque?o pinchazo, unas fotos, y ya est¨¢. Tardaremos unos minutos". En el monitor aparece una ficha que el oftalm¨®logo va rellenando. Mientras tanto, la enfermera le inyecta a Medina en su brazo izquierdo una sustancia verde (flurece¨ªna s¨®dica) que act¨²a como un trazador y que en 20 segundos, mezclada con la sangre, llegar¨¢ a la retina del ojo. El proceso ha durado apenas un minuto, pero el m¨¦dico tiene ya un mapa preciso de la enfermedad ocular y, probablemente, de la cura.