La fusi¨®n de British Steel y Hoogovens crear¨¢ el primer grupo metal¨²rgico europeo

British Steel y su rival holand¨¦s Koninklijke Hoogovens anunciaron ayer un acuerdo de fusi¨®n para crear el grupo m¨¢s importante de Europa en producci¨®n de acero y aluminio y el tercero del mundo. La nueva compa?¨ªa, que nace con las siglas provisionales BSKH, tendr¨¢ un valor en Bolsa de 2.980 millones de libras (unos 745.000 millones de pesetas) y una plantilla en torno a los 70.000 empleados. "La fusi¨®n ofrece una excelente oportunidad para formar un grupo l¨ªder con base europea y una red internacional de producci¨®n y distribuci¨®n", dijeron las empresas.

La operaci¨®n se realizar¨¢ mediante intercambio de acciones, y British Steel, que en Bolsa tiene mucho m¨¢s valor que su nuevo socio holand¨¦s, tendr¨¢ una representaci¨®n del 61,7% en el capital del nuevo consorcio resultante del acuerdo.Esta representaci¨®n se trasladar¨¢ al consejo. Para ajustar esta distribuci¨®n de la propiedad, la metal¨²rgica brit¨¢nica pagar¨¢ en met¨¢lico a sus accionistas 35 peniques por acci¨®n, con un desembolso total de 694 millones de libras (179.100 millones de pesetas). Londres ser¨¢ la sede central de la nueva BSKH, cuya presidencia ocupar¨¢ el brit¨¢nico Brian Moffat. John Bryant, de British Steel, y Fokko van Duyn, de Hoogovens, compartir¨¢n los cargos de director ejecutivo.

El nuevo l¨ªder europeo de la industria metal¨²rgica cotizar¨¢ en las bolsas de Londres, Amsterdam y Nueva York y tendr¨¢ unas ventas cercanas a los 10.000 millones de libras (2,58 billones de pesetas). Ambas compa?¨ªas admitieron ayer en sendos comunicados que la fusi¨®n repercutir¨¢ en la eliminaci¨®n de puestos de trabajo tanto en los niveles directivos como en los administrativos, pero rechazaron anticipar el cierre de factor¨ªas.

"El objetivo de la operaci¨®n est¨¢ en potenciar el crecimiento, no en reducir costes", se?al¨® ayer un portavoz de British Steel. La eliminaci¨®n de empleos duplicados, las operaciones de compra conjuntas y otra serie de ajustes previstos resultar¨¢n, de acuerdo a las estimaciones de ambos socios, en un recorte anual de gastos en torno a los 200 millones de libras a partir del tercer a?o de la fusi¨®n.

Ambas empresas esperan concluir la operaci¨®n en el oto?o pr¨®ximo. Hasta entonces, el futuro de la plantilla de British Steel se presenta incierto. En los dos ¨²ltimos a?os la compa?¨ªa ha eliminado 4.000 puestos de trabajo siguiendo un plan de remodelaci¨®n que incluye hasta unos 10.000 despidos. Con el proyecto en revisi¨®n como consecuencia del acuerdo con Hoogovens, analistas brit¨¢nicos del sector no descartan el cierre de la planta de Llanwer, al sur de Gales, cuya producci¨®n de l¨¢minas de acero es similar al producto de Ijnuiden en Holanda.

"No hay necesidad de que se pierdan nuevos puestos de trabajo", se?al¨® por su parte Michael Leahy, portavoz sindical. Con la adquisici¨®n de Hoogovens, British Steel se apunta al tren de consolidaci¨®n de la industria sider¨²rgica europea, que arranc¨® con la entrada de la luxemburguesa Arbed en la espa?ola Aceralia, la fusi¨®n entre las francesas Usinor y Cockerille Sambre y la uni¨®n de las alemanas Thyssen y Krupp Stahl. El coloso brit¨¢nico, que ayer anunci¨® una reducci¨®n de beneficios para el ejercicio 1998-1999 de 173 millones de libras (hasta 142 millones de libras), viene perdiendo terreno como consecuencia de la revalorizaci¨®n de la libra, el debilitamiento del euro y el deterioro en los mercados asi¨¢ticos. Sumando recursos con su nuevo socio, que tuvo unos beneficios de 342 millones de euros en 1998, se colocar¨¢ a la cabecera de Europa y en el tercer puesto mundial, tras la coreana Posco y la japonesa Nippon Steel.

El sector de la siderurgia, que ha realizado fuertes ajustes en sus plantillas y ha abordado grandes inversiones en tecnolog¨ªas en todo el mundo, busca a trav¨¦s de las fusiones un ajuste en sus costes y para ello est¨¢ aprovechando unos a?os en los que la producci¨®n mantiene crecimientos sostenidos desde 1997, debido a una mejor coyuntura econ¨®mica.