B¨¦lgica reanuda la venta de pollos, cerdos y vacas no contaminados con dioxina

El Gobierno belga hace los deberes, pero no puede evitar que la crisis de la dioxina se propague cada vez m¨¢s por todo el mundo. Las autoridades belgas aseguraron ayer que su carne, incluida la de las 2.336 granjas de la lista negra, es "segura", si bien s¨®lo devolvieron al mercado los pollos, el vacuno y los cerdos que no provienen de ellas. Los problemas asoman desde varios frentes: la Comisi¨®n Europea asegur¨® que habr¨¢ sanciones, los agricultores bloquearon todo el d¨ªa las carreteras de salida a Francia y Holanda, y decenas de pa¨ªses han decretado embargos contra la producci¨®n animal belga.

, Despu¨¦s de 15 d¨ªas fren¨¦ticos, la crisis alimentaria de la dioxina, la m¨¢s grave en Europa desde el esc¨¢ndalo de las vacas locas (1996), sigue dispar¨¢ndose y cada d¨ªa parece estar m¨¢s fuera de control, para desgracia del Gobierno democristiano de Jean-Luc Dehaene, que afronta elecciones generales el pr¨®ximo domingo. En los ¨²ltimos d¨ªas, Dehaene y sus colaboradores han hecho lo imposible por agradar a la Comisi¨®n Europea y frenar el p¨¢nico que se ha apoderado de los consumidores de toda Europa, donde varios pa¨ªses han registrado importantes descensos en sus ventas de pollo. Un informe del Gobierno belga hecho p¨²blico ayer asegura que los an¨¢lisis hechos a los animales alimentados en las granjas que hab¨ªan comprado el pienso contaminado han dado todos resultado negativo. "Este Gobierno est¨¢ convencido, y las pruebas lo constatan, de que no hay ning¨²n problema con los alimentos de estas compa?¨ªas", declar¨® Dehaene, quien anunci¨® que iniciar¨¢ una campa?a para que la Uni¨®n Europea suavice "lo antes posible" sus restricciones a la importaci¨®n de productos belgas. Los piensos con que las granjas incluidas en la lista negra alimentaron a sus animales fueron suministrados por la firma Verkest, responsabilizada por el Gobierno belga del origen de la crisis. Las no incluidas en la ya famosa relaci¨®n est¨¢n retornando en estas horas a la normalidad. El 75% de los criadores de pollo pudo sacrificar y transportar ayer otra vez a sus animales, tras dos semanas de suspensi¨®n. El d¨ªa previsto para la reanudaci¨®n del comercio hab¨ªa sido, en un principio, el mi¨¦rcoles, pero un fallo en la confecci¨®n de las listas hab¨ªa obligado a la Administraci¨®n belga a suspenderla otra vez. Para la pasada madrugada estaba previsto tambi¨¦n que el 60% de los productores de cerdo y el 83% de los de carne de vacuno reanudaran la actividad. Adem¨¢s, y para completar su operaci¨®n de maquillaje, el Gobierno belga entreg¨® a la Comisi¨®n Europea la lista de las explotaciones afectadas por la contaminaci¨®n con dioxinas, pero no la publicar¨¢ porque la ley del pa¨ªs lo proh¨ªbe. El Ejecutivo comunitario no se ha conmovido por las intenciones belgas, ha tachado el listado de "inconsistente" y ha criticado duramente que el Gobierno belga se salte a la torera las disposiciones comunitarias.

Sanci¨®n europea

Las promesas de B¨¦lgica no han impedido que la Comisi¨®n anunciara ayer sanciones contra ese pa¨ªs. El problema no es tanto que se haya producido la contaminaci¨®n, sino que no se haya informado de la misma a los Quince en su momento. Martine Reicherts, portavoz del presidente de la Comisi¨®n, asegur¨® que "habr¨¢ un procedimiento de sanci¨®n contra B¨¦lgica, al menos porque las autoridades belgas no notificaron en tiempo ¨²til, a finales de marzo, el resultado de las investigaciones sobre la contaminaci¨®n". Adem¨¢s, B¨¦lgica no podr¨¢ vender por el momento sus productos av¨ªcolas, porcinos y bovinos a la Uni¨®n Europea "ya que no hay ning¨²n certificado de exportaci¨®n", indic¨® la portavoz. El Gobierno belga debi¨® afrontar ayer, adem¨¢s, las barricadas que levantaron durante todo el d¨ªa agricultores de su pa¨ªs, furiosos con la gesti¨®n del Ejecutivo y con la prohibici¨®n de sus productos en los puestos fronterizos con Holanda y Francia, con el fin de evitar que entraran en B¨¦lgica los productos de otros pa¨ªses. Los agricultores depusieron su actitud al anochecer, pero consiguieron al menos que la Comisi¨®n volviera a amonestar, con otro pretexto, al Ejecutivo belga. "Las autoridades belgas deben tomar medidas para acabar con los disturbios contra la libertad de circulaci¨®n de mercanc¨ªas en la UE", indic¨® un portavoz. Mientras tanto, los pa¨ªses de fuera de Europa siguen prohibiendo el ingreso en sus territorios de los productos animales y derivados l¨¢cteos belgas y, en algunos casos, el embargo se aplica tambi¨¦n a Holanda, Francia y Alemania, pa¨ªses que, seg¨²n ellos mismos han reconocido, recibieron tambi¨¦n, si bien en menor cantidad, el pienso contaminado con dioxina. Siete pa¨ªses de Asia (China, Malaisia, Singapur, Hong Kong, Taiwan, Corea del Sur y Filipinas), varios de ?frica (Sur¨¢frica, Burkina Faso, Sierra Leona, Guinea Conakry, Costa de Marfil y Egipto), otros de Am¨¦rica del Sur (Argentina, Uruguay, Brasil y Venezuela) y Europa (Bulgaria, Hungr¨ªa, Polonia y Ucrania) se sumaron en los ¨²ltimos d¨ªas a los pioneros -Estados Unidos, Canad¨¢, Rusia y Australia- con diversos embargos contra la producci¨®n belga.