El GIL, la fuerza m¨¢s votada

Los resultados electorales en Melilla est¨¢n lejos de arrojar ninguna certidumbre. Por el momento, se ha consolidado el voto de castigo a los partidos de ¨¢mbito estatal (el PP baja de 14 diputados-concejales a cinco, el PSOE de cinco a dos e IU sigue sin estrenarse), pero la victoria insuficiente del GIL abre a¨²n m¨¢s interrogantes. Y en Ceuta, el GIL a ra?¨® la mayor¨ªa absoluta, hizo retroceder al PP y al PSOE y conden¨® a la hecatombe a los localistas. En Melilla, los siete esca?os obtenidos sobre 25 posibles no est¨¢n lejos de la mayor¨ªa absoluta que persegu¨ªa el GIL. El candidato del partido, Crisp¨ªn Lozano, se limit¨® ayer a decir que los pactos "son una cosa muy seria" y no ha dado ni una pista de por d¨®nde pueden ir las ofertas de su partido para intentar gobernar.

La coalici¨®n que gobierna en la ciudad aut¨®noma desde hace 15 meses, integrada por el Partido Independiente de Melilla, Uni¨®n por Melilla y la formaci¨®n que aglutina la gran mayor¨ªa del voto musulm¨¢n, Coalici¨®n por Melilla (CpM), tiene la mayor¨ªa justa (si se unen al PSOE) para seguir al mando de la ciudad aut¨®noma. Ahora bien, ha habido un cambio sustancial. CpM ha conseguido aglutinar a la pr¨¢ctica totalidad de los votos de origen marroqu¨ª (el 20% de la poblaci¨®n), con lo que se coloca como la segunda fuerza m¨¢s votada en Melilla y la primera entre los partidos de la coalici¨®n de Gobierno. Por lo tanto, su l¨ªder Mustaf¨¢ Hamed, tambi¨¦n conocido como Aberch¨¢n, podr¨ªa convertirse en el primer presidente de Melilla de origen marroqu¨ª.

Una vez descartado el GIL para los pactos (no incluy¨® ni a un s¨®lo candidato de origen marroqu¨ª en su lista) tambi¨¦n existe la posibilidad de que el PSOE pierda su sitio en la coalici¨®n en favor del PP.

En Ceuta, la irrupci¨®n del partido que preside Jes¨²s Gil le dej¨® al borde de la mayor¨ªa absoluta causando estragos en las otras fuerzas pol¨ªticas. S¨®lo una formaci¨®n ceut¨ª sali¨® reforzada en medio de la hecatombe provocada por la irrupci¨®n del GIL: el Partido Democr¨¢tico y Social. Y no s¨®lo eso, el PDS tiene ahora la llave de la gobernabilidad. Puede darle la mayor¨ªa absoluta al GIL (12) o alcanzar un acuerdo con PP (8) y PSOE (2) para que Antonio Sampietro, el candidato gilista, no se siente en el sill¨®n de la presidencia auton¨®mica. Tanto populares como socialistas se apresuraron a descartar que ellos vayan a darle mayor¨ªa absoluta al GIL. El PDS obtuvo unos resultados hist¨®ricos, al conseguir tres de los 25 esca?os de la asamblea, una representaci¨®n jam¨¢s alcanzada por un partido musulm¨¢n que triplica los resultados de 1995 e incluso supera a los socialistas.

"Ser¨ªa un esc¨¢ndalo que el GIL no gobierne, siendo la lista m¨¢s votada", clamaba ayer Sampietro. Mustaf¨¢ Mizziam, l¨ªder del PDS, se dejaba cortejar: "Estamos por la gobernabilidad, pero no daremos cheques en blanco". Mizziam guardaba el secreto de qu¨¦ pareja pol¨ªtica le gusta m¨¢s. Desde el PP se propugnan "acuerdos puntuales" para parar al GIL, pero los socialistas no parecen dispuestos a dar sus votos para que el popular Jes¨²s Fortes conserve la alcald¨ªa presidencia. "Con el PP ni agua bendita, ni siquiera para frenar al GIL, ser¨ªa una falta de respeto al resultado de las urnas". El candidato socialista Alberto N¨²?ez era rotundo, pese a que en 1995 el PSOE aup¨® a un partido localista (PFC) para que no gobernara el PP, que fue la lista m¨¢s votada. Despu¨¦s ese acuerdo se rompi¨® y el PP se hizo con el poder.