El secreto de Mandela

La sabidur¨ªa en la que se apoyaba la comprensi¨®n de la psicolog¨ªa de los surafricanos blancos que Mandela hab¨ªa adquirido en la c¨¢rcel quedaron reflejadas en la primera conferencia de prensa que concedi¨®, al d¨ªa siguiente de dejar la c¨¢rcel. El objetivo de las negociaciones, declar¨® -repitiendo lo que hab¨ªa dicho a sus interlocutores secretos en innumerables ocasiones-, era conciliar los temores de los blancos con las aspiraciones de los negros. "Entendemos ese miedo, Los blancos son tambi¨¦n surafricanos. Queremos que se sientan seguros". Niel Barnard, Kobie Coetsee y el resto de sus colegas del Gobierno dieron un suspiro de alivio. Su opini¨®n hab¨ªa resultado acertada. Mandela no les hab¨ªa enga?ado. No era ning¨²n ayatol¨¢ agitador. Pero les hab¨ªa vencido, o iba a vencerlos muy pronto. Sin embargo, como dice su abogado George Bizos, una lecci¨®n que aprendi¨® Mandela cuando era joven, cuando se dedicaba al boxeo, y que siempre ha aplicado en su vida pol¨ªtica, es la de derrotar al adversario pero nunca humillarlo. Barnard, cinco a?os despu¨¦s de las elecciones que les expulsaron a ¨¦l y a los suyos del poder, parece haber entendido el secreto de Mandela. "Cuando has sufrido penalidades, no humillas a la gente", afirma el antiguo jefe del espionaje del apartheid. "Porque las penalidades te permiten entender mucho mejor los miedos de los dem¨¢s. ?No es eso lo que trasciende en Mandela? Lo que quiero decir es que Mandela, en el fondo, cree en la construcci¨®n de este pa¨ªs, y ha trabajado m¨¢s que cualquier otro, a costa de enormes sacrificios personales, para conseguirlo".