El Tribunal de La Haya sospecha que hubo m¨¢s matanzas de lo previsto

Los investigadores del Tribunal Penal Internacional de La Haya han constatado al llegar a Kosovo que hay indicios de m¨¢s matanzas de las que pensaban. As¨ª lo anunci¨® ayer el portavoz del tribunal, Paul Risley: "El n¨²mero de lugares donde se produjeron cr¨ªmenes de guerra es m¨¢s importante de lo que preve¨ªamos". Los primeros equipos de expertos, integrados por juristas, m¨¦dicos forenses, fot¨®grafos, polic¨ªas y cart¨®grafos, llegaron el viernes y el s¨¢bado.

"Se trata de gente cedida por los Gobiernos que trabajan habitualmente en tareas urgentes de ayuda, por ejemplo en desastres naturales o catastrofes", explica Jim Landale, otro portavoz del tribunal. Espa?a uni¨® su disponibilidad a la ya presentada por el Reino Unido, Noruega, Holanda, Alemania y Francia. Agentes del FBI, que tambi¨¦n participan en las operaciones, y efectivos de la Polic¨ªa Montada de Canad¨¢ estaban a la espera en Skopje (Macedonia) desde mediados de la semana pasada. En principio, el tribunal hab¨ªa obtenido del secretario general de Naciones Unidas Kofi Annan la autorizaci¨®n para reclutar unos 300 expertos dispuestos a respaldar los trabajos de su personal fijo, pero el n¨²mero ha quedado reducido ahora a poco m¨¢s de un centenar.

"En un primer momento cont¨¢bamos con incluir especialistas en desactivaci¨®n de minas antipersonales y log¨ªstica, pero finalmente los miembros de la Kfor van a asumir estas tareas", dice Landale. Alojamiento, comidas y transporte ser¨¢n coordinados desde el cuartel general de las fuerzas internacionales en Pristina.

Los primeros grupos realizan trabajos preliminares, como determinar los lugares exactos donde se han cometido las atrocidades y tomar fotograf¨ªas que dejen constancia de los escenarios, antes de que refugiados, periodistas o curiosos "contaminen la zona y borren las pruebas", como dijo la fiscal Louise Arbour.

En unos d¨ªas, los expertos que se incorporen comenzar¨¢n a estudiar las pruebas "a la vista", las que pueden borrarse m¨¢s f¨¢cilmente. Entre sus tareas estar¨¢n las de tratar de identificar y determinar las causas de la muerte de quienes a¨²n no han sido enterrados, y la recopilaci¨®n de documentos, casquillos de balas y otros restos de proyectiles. "Aunque constituyen las muestras m¨¢s brutales de lo ocurrido en Kosovo en estos meses, las fosas comunes no son nuestra prioridad. Desgraciadamente, esas pruebas no desaparecen", dice Landale.

Desde que finalizaron las guerras de Bosnia y Croacia en 1995 hasta que los expertos del Tribunal Penal para la ex Yugoslavia pudieron empezar a investigar los atropellos cometidos pasaron muchos meses, incluso a?os. Sus intentos por llegar al escenario de las brutales violaciones de los derechos humanos, ejecuciones sumarias, violaciones y torturas fueron dificultados constantemente por las autoridades serbobosnias, que se negaron a cooperar. Habida cuenta de que la corte se acababa de crear y gozaba todav¨ªa de poco prestigio y menores recursos, el apoyo internacional era bastante limitado.

Tras el conflicto de Kosovo, las circunstancias han cambiado. La retirada de los soldados serbios, la ausencia de control de Belgrado y la declaraci¨®n expresa en el acuerdo de paz de colaboraci¨®n con la oficina del fiscal de La Haya han puesto al tribunal inmediatamente en marcha.

Aunque los responsables de la oficina del fiscal no quieren determinar con exactitud a qu¨¦ lugares se est¨¢n dirigiendo los equipos -"por cuestiones de seguridad y para evitar que la prensa entorpezca los trabajos"-, han reconocido que seguir¨¢n las huellas de los soldados de la Kfor, que han detectado ya m¨¢s de una quincena de escenarios de salvajes matanzas, incluyendo tres posibles fosas comunes cerca de la ciudad de Kacanik y una casa en Kusha, donde el martes encontraron 20 cuerpos achicharrados. Tambi¨¦n ser¨¢n objeto de sus investigaciones las seis ciudades y pueblos que aparec¨ªan como escenarios de brutales atropellos en el documento de acusaci¨®n contra Milosevic.