Cerca del juego y lejos de las medallas

El deporte escolar sigue teniendo muchos resquicios de la concepci¨®n elitista de esta competici¨®n, aquella que s¨®lo premia al mejor, al m¨¢s r¨¢pido y al m¨¢s fuerte. Todos parecen estar de acuerdo: la ense?anza del deporte y la educaci¨®n f¨ªsica en Espa?a ha evolucionado mucho en los ¨²ltimos a?os, pero todav¨ªa falta. Acad¨¦micos y padres de alumnos aseguran que, tal y como se organizan los campeonatos, se deja fuera del circuito a muchos chicos y chicas que necesitan del deporte, pero no est¨¢n dotados para la alta competici¨®n. "El esquema federativo es muy v¨¢lido, pero s¨®lo busca el producto, el rendimiento del chico", dice Santiago Romero Granados, decano de la Facultad de Ciencias de la Educaci¨®n de Sevilla. Como casi todos los expertos en deporte escolar, Romero reconoce la evoluci¨®n de la educaci¨®n f¨ªsica -"hemos conseguido el enfoque del deporte como recreaci¨®n"-, pero advierte de que en muchos otros aspectos el esquema federativo (sistema de competici¨®n copiado del deporte de alto rendimiento) se sigue imponiendo. "Especialmente en las actividades extraescolares. Los padres quieren que sus hijos hagan deporte, pero no necesariamente que sean campeones, sobre todo porque saben que muchos nunca lo llegar¨¢n a ser". Seg¨²n un estudio realizado el a?o pasado en Sevilla, los chicos que acuden a los centros deportivos dicen que lo hacen "para ser campeones". "La labor del educador", recomienda Granados, "debe ser ense?ar a los chicos que detr¨¢s de las estrellas del deporte hay muchos frustrados que se han quedado en el camino".

Falta de conexi¨®n

?C¨®mo hacer entonces para que los ni?os que tienen cualidades innatas para el deporte puedan probar suerte como atletas? Los criterios est¨¢n m¨¢s repartidos. Para los expertos, es la escuela la que debe estar muy atenta para orientar a estos chicos y ponerlos a disposici¨®n de las federaciones. Manuel Luis Mart¨ªn, especialista en deporte escolar de FETE-UGT y presidente del Congreso de Educaci¨®n F¨ªsica que se realizar¨¢ en Jerez de la Frontera en septiembre pr¨®ximo, cree que falta mucha conexi¨®n entre el mundo federativo y el mundo de la escuela. Seg¨²n Mart¨ªn, existe un problema econ¨®mico que dificulta las relaciones. "En los casos evidentes de destreza deportiva, el profesor de educaci¨®n f¨ªsica lo tiene f¨¢cil. El problema es que, por falta de medios, muchos educadores pierden la posibilidad de saber si sus alumnos son buenos. Siguen siendo las familias las que acercan al chico a la federaci¨®n". Mart¨ªn advierte, en cambio, de que el deporte escolar "no debe ser nunca un camino hacia la ¨¦lite. El deporte es bueno en s¨ª mismo".

El Consejo Superior de Deportes (CSD) transfiri¨® a las comunidades aut¨®nomas, en enero de este a?o, las competencias sobre promoci¨®n deportiva. Sigue estando bajo su ¨®rbita la organizaci¨®n de las competiciones interescolares, uno de los blancos favoritos de las cr¨ªticas de los padres y expertos. Jos¨¦ Luis

Aguado, subdirector general de cooperaci¨®n deportiva del CSD, se defiende de las acusaciones de elitismo. "Es evidente que al final llegan los mejores, para eso est¨¢n las competiciones", asegura. Y apela a las estad¨ªsticas: "En junio pr¨®ximo, en C¨¢diz, habr¨¢ unos 2.700 ni?os en la fase final de nuestros torneos. Son muchos ni?os, no es algo tan elitista".

Aguado cree que el deporte escolar en Espa?a est¨¢ en el mejor momento de su historia. "El 60% de los adolescentes practica alg¨²n deporte. Ya es com¨²n ver a los chicos en ch¨¢ndal por la calle". En cuanto al hallazgo de talentos, Aguado sostiene que son las federaciones y los clubes los que deben acercarse a las escuelas. "Muchos ya lo est¨¢n haciendo. El caso paradigm¨¢tico es el del instituto Ramiro de Maeztu y su equipo de baloncesto, el Estudiantes", a?ade.

Una de las ideas que han librado a la educaci¨®n f¨ªsica del estr¨¦s de producir campeones es la que supone que el esquema de la pir¨¢mide -cuantos m¨¢s ni?os practiquen un deporte, m¨¢s medallas habr¨¢ en el futuro- est¨¢ superado. La tendencia es pensar que los atletas de ¨¦lite se fabrican.

Carlos Ladr¨®n de Guevara, presidente de la Confederaci¨®n Espa?ola de Padres de Alumnos (CEAPA), sostiene que lo que quieren los padres es "que sus hijos practiquen deporte como un juego. El deporte federado es muy elitista". Ladr¨®n de Guevara cree que las dos horas semanales que se dedican al deporte en los colegios son insuficientes: "El problema es que los profesores no se involucran en el deporte m¨¢s all¨¢ de las horas de clase, y el deporte extraescolar es fundamental para crear h¨¢bitos deportivos saludables". Propone que existan delegados para supervisar la calidad de las instalaciones -todos los consultados concuerdan en que dejan mucho que desear- y que se aumente la cantidad de profesores.

"Los medios de comunicaci¨®n son otro problema", asegura. "Propician un modelo de lujo, como la Liga de las estrellas". Ladr¨®n de Guevara carga tambi¨¦n las tintas en las familias -"fomentan poco la actividad deportiva"-, dice que sin su apoyo "la educaci¨®n para el deporte nunca estar¨¢ generalizada" y que cada vez hay menos padres "que quieran ver a sus hijos en un centro de alto rendimiento".