Cuba sale al paso de nuevas denuncias de que est¨¢ fabricando armas biol¨®gicas

?Est¨¢ Cuba produciendo o almacenando armas biol¨®gicas? ?Es capaz de producir armas de este tipo con car¨¢cter ofensivo? ?Est¨¢ Fidel Castro, presidente cubano, prepar¨¢ndose para una guerra biol¨®gica en caso de enfrentamiento con EEUU? Estas preguntas, que para las autoridades cubanas no son m¨¢s que una "locura" propia de mentes calenturientas, han saltado a las primeras p¨¢ginas de la prensa de Miami tras la publicaci¨®n en EEUU de dos libros sobre el tema.

Uno de ellos, Biohazard (Contaminaci¨®n biol¨®gica), est¨¢ escrito por Ken Alibek, un excoronel sovi¨¦tico que en 1992 pidi¨® asilo pol¨ªtico en EEUU, y afirma en su libro que "Cuba posee un programa muy sofisticado de biotecnolog¨ªa y de desarrollo molecular que hace casi diez a?os produce armamentos bact+eriol¨®gicos". Alibek dice en Bihozard que su jefe en la exUni¨®n Sovi¨¦tica, el general Yuri Kalinin -un miembro del Bur¨® Pol¨ªtico del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, entonces responsable del programa microbiol¨®gico de la URSS-, viaj¨® a La Habana en 1991 y volvi¨® convencido de que la isla contaba con un moderno programa de armamentos biol¨®gicos.

El libro de Alibek, publicado por Random House, y las posteriores declaraciones y entrevistas concedidas por el ex militar -que, seg¨²n el diario El Nuevo Herald desert¨® del programa sovi¨¦tico de armamentos bacteriol¨®gicos cuando era su subdirector, y pas¨® varios a?os en Washington como consultor del Departamento de Defensa y de la CIA- han ca¨ªdo como agua de mayo en la prensa de Miami, siempre ¨¢vida de noticias que satanicen a Fidel Castro y den la imagen de que su r¨¦gimen supone un peligro potencial para EEUU. Las autoridades cubanas, que no suelen desmentir las informaciones de este tipo que c¨ªclicamente se publican en Florida, no se han callado en esta ocasi¨®n. "Es la historia m¨¢s tremenda, rid¨ªcula y fantasiosa que se haya inventado jam¨¢s", dijo la semana pasada en La Habana el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Alejandro Gonz¨¢lez.

Gonz¨¢lez afirm¨® que "en Cuba no se le ha ocurrido nunca a nadie producir ni almacenar armas qu¨ªmicas, biol¨®gicas o nucleares". "Ni tenemos arsenales ni constituimos un peligro para EEUU, como bien sabe el Pent¨¢gono", subraya Gonz¨¢lez.

Las autoridades cubanas se adelantaban as¨ª a las posibles declaraciones de funcionarios norteamericanos sobre el tema abierto por el libro de Alibek. El Nuevo Herald ya mencionaba la semana pasada un informe del secretario de Defensa, William Cohen, en el que se?alaba el a?o pasado que, "con su conocimiento y sus instalaciones, Cuba podr¨ªa contar con un programa de armamentos biol¨®gicos por lo menos en su etapa de investigaci¨®n y desarrollo". Para caldear m¨¢s este ambiente de guerra fr¨ªa o biol¨®gica, est¨¢ la reciente aparici¨®n en EEUU de la novela Smoke screen (Cortina de humo), del escritor Vincent Patrick. En ella, el presidente de EEUU es amenazado por Castro, que pide el fin del embargo y una disculpa oficial por tantos a?os de hostilidad. Si no, Castro, desesperado ante una inminente crisis que destruir¨ªa su revoluci¨®n, promete lanzar una guerra bacteriol¨®gica contra EEUU que acabar¨ªa con el 40% de la poblaci¨®n norteamericana. Casi nada.