Cientos de islamistas son liberados en Argelia como gesto de reconciliaci¨®n
ENVIADO ESPECIAL El barbudo Samir no cab¨ªa de gozo dentro de su chilaba. Eran las cuatro de la tarde, bajo un sol de justicia, cuando esperaba la hora del perd¨®n para su amigo Jeier Ed¨ªn, de 35 a?os, ante la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad de Serkayi, el legendario penal de Barbarroja de la alcazaba de Argel. Hace dos a?os ya que Ed¨ªn est¨¢ entre rejas, acusado de ser miembro del Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS). "Bienvenido, eso es lo que le dir¨¦ en cuanto le vea", musitaba entre los dos centenares de familiares de reclusos que presenciaban el goteo de excarcelaciones. M¨¢s de una treintena de presos islamistas salieron ayer en libertad de esa prisi¨®n gracias al indulto dictado la v¨ªspera por el presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, en un primer paso efectivo de su pol¨ªtica de reconciliaci¨®n nacional. Un total de 600 presos de esa c¨¢rcel ser¨¢n puestos en libertad en los pr¨®ximos d¨ªas para unirse a los miles de liberados en todo el pa¨ªs. Nadie sabe todav¨ªa el n¨²mero de amnistiados, aunque el c¨¢lculo m¨¢s conservador es de 5.000, y el m¨¢s optimista, de 15.000.
La euforia de la tarde qued¨® diluida por la noche, cuando el presidente defraud¨® las expectativas y, en un discurso televisado, ni anunci¨® las esperadas medidas que iban a completar su programa de reconciliaci¨®n ni el fin del estado de excepci¨®n. Buteflika habl¨® de la necesidad de revisar el pasado y reconocer errores.
El presidente de Argelia invita a los militares a sumarse al proceso de reconciliaci¨®n nacional
Entre el ulular de los yu-yus de las mujeres y los gritos de j¨²bilo de los hombres, un joven reci¨¦n excarcelado de la prisi¨®n de Serkadji se fund¨ªa en abrazos con sus padres. A los pocos minutos sali¨® otro indultado. Tampoco era Jeier Ed¨ªn, encarcelado, seg¨²n Samir, sin acusaci¨®n ni juicio. "Le esperar¨¦ una semana, un mes, no dormir¨¦... es mi amigo, pero esta vez parece que va en serio: la reconciliaci¨®n es la ¨²nica soluci¨®n". Los reclusos libres se negaban, entre sonrisas, a hacer declaraciones: "No. Por favor. Ya ha pasado todo", se excusaba uno. Seiscientos detenidos de la prisi¨®n de Serkayi van a ser liberados estos d¨ªas. Seg¨²n fuentes penitenciarias, el proceso de excarcelaci¨®n est¨¢ siendo lento a causa de complejas formalidades legales.
Zohra Kadari, de 60 a?os, acudi¨® ante la c¨¢rcel de Serkayi, con una bandera argelina. No en vano, el pa¨ªs magreb¨ª celebraba ayer el 37? aniversario de su independencia, lograda tras una sangrienta guerra contra el poder colonial franc¨¦s. Tal vez el a?o que viene los argelinos puedan aprovechar esa misma conmemoraci¨®n para recordar el fin del conflicto civil que ha vivido desde 1992. La anulaci¨®n de la segunda vuelta de las elecciones legislativas, que se dispon¨ªa a ganar el FIS hace siete a?os, desencaden¨® una violenta reacci¨®n islamista contra un r¨¦gimen de base militar. Y los barrios del viejo Argel eran su feudo.
Zohra esperaba la salida de su hijo y de su yerno, dos j¨®venes de la alcazaba encarcelados por prestar apoyo a un grupo armado integrista. "Llevan m¨¢s de dos a?os en prisi¨®n sin saber por qu¨¦ est¨¢n detenidos", se quejaba la mujer de la bandera antes de mostrar una esquela recortada: "Es de mi sobrino. Lo degollaron hace dos a?os mientras rezaba en la mezquita". M¨¢s de 100.000 personas han muerto en Argelia atrapados en el torbellino de violencia que ha enfrentado a las guerrillas isl¨¢micas con las fuerzas de seguridad.
Buteflika se ha comprometido a reconciliar a los argelinos con su pasado para poder sentar las bases de un futuro de paz. Aunque, por ahora, los hechos a¨²n siguen de lejos a sus palabras, la imagen de la salida de los primeros presos de la c¨¢rcel de Barbarroja puede servir para marcar un hito de esperanza. El presidente, elegido el 15 de abril, ha actuado r¨¢pido: ha indultado a miles de islamistas "sin delitos de sangre" y pretende hacer aprobar en el Parlamento antes de 10 d¨ªas la ley de Concordia Civil para sellar el alto el fuego con el Ej¨¦rcito Isl¨¢mico de Salvaci¨®n, el brazo armado del FIS. Adem¨¢s, quiere que su pol¨ªtica de reconciliaci¨®n sea ratificada por el pueblo.
El presidente argelino, experimentado en maniobras diplom¨¢ticas desde que fuera ministro de Exteriores, entre 1963 y 1978, ha pedido el respaldo del Ej¨¦rcito. En un acto celebrado el domingo, Buteflika dijo: "Con franqueza y sinceridad, en el nombre de la Constituci¨®n y de las leyes de la Rep¨²blica, me ayuden a concretar lo que llamamos concordia civil". Al parecer, se cuadraron ante ¨¦l.
En la sofocante tarde de Argel, en la que comenzaba a soplar la brisa de la concordia, resonaban a¨²n los ecos bereberes del m¨²sico rai Cheb Mami, que a primeras horas de la madrugada hab¨ªa iniciado su recital ante 20.000 espectadores con la canci¨®n Vuelve a m¨ª.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.