C?SAR CORPA PINTOR "Mis cuadros son un grito de rebeld¨ªa, de decir basta ya"
C¨¦sar Corpa, de 53 a?os, onubense de Cuenca, irrumpi¨® en la pintura en 1992 pero alcanz¨® r¨¢pidamente una notable madurez, seg¨²n los cr¨ªticos, tras muchos a?os previos de meditaci¨®n sobre el arte. Acaba de clausurar con gran ¨¦xito una exposici¨®n en Punta Umbr¨ªa. C¨¦sar Corpa, director de un colegio de la capital onubense, lleg¨® a esta provincia en 1970 y fund¨® un grupo teatral. Pregunta. ?C¨®mo compagina la ense?anza con la pintura? Respuesta. Significan dos facetas de mi vida. La pintura es mi pasi¨®n. La docencia, mi profesi¨®n, pero tambi¨¦n me gusta mucho. P. Usted practica la abstracci¨®n, la vanguardia, ?por qu¨¦ eligi¨® esa forma est¨¦tica? R. Cuando yo estudiaba el Bachillerato en Cuenca se puso en marcha el Museo de Arte Abstracto. Esos a?os tan importantes en la formaci¨®n de una persona coincidieron en Cuenca con la irrupci¨®n de una serie de pintores y de obras que yo no conoc¨ªa. Me impactaron. El lenguaje de lo abstracto se convirti¨® en algo familiar para m¨ª. Cuando cog¨ª finalmente el pincel, mi pintura era ¨¦sa. Creo que la abstracci¨®n es la forma est¨¦tica de nuestro tiempo. P. ?Por qu¨¦ le atrae, sobre todo, el expresionismo? R. Me gustan los expresionistas de la escuela de Nueva York de los a?os cuarenta y setenta, y toda una serie de obras que fueron surgiendo en distintos lugares, y que en Espa?a se sintetiza en el grupo El Paso, la escuela de Cuenca, y en pintores como Millares, Saura, Zobel y Guerrero. P. ?Por qu¨¦ comenz¨® a pintar tan tarde? R. Pas¨¦ mucho tiempo intent¨¢ndolo, pero sent¨ªa aut¨¦ntico miedo de enfrentarme a un cuadro. Fueron a?os en los que me dedicaba al teatro, la fotograf¨ªa, la cr¨ªtica cinematogr¨¢fica, y, mientras tanto, maduraba como pintor. Estudiaba detenidamente el arte, sobre todo del siglo XX, e iba en busca de un estilo propio. Tambi¨¦n realic¨¦ una reflexi¨®n en profundidad sobre el arte y la pintura actual: llegu¨¦ a la conclusi¨®n de que el autor ha de ser un hijo de su tiempo. P. ?Qu¨¦ quiere transmitir con sus cuadros? R. Un grito de rebeld¨ªa, de basta ya, contra la situaci¨®n que se est¨¢ viviendo en l¨ªneas generales. Cada vez son mayores las desigualdades entre el Primer y el Tercer Mundo. Pero no todos mis cuadros son un grito. Picasso hizo el Guernika, que era un alegato definitivo contra la guerra, pero tambi¨¦n pint¨® Los arlequines y Las se?oritas de Avignon, cuadros serenos, y esa circunstancia se da en todos los autores. Mi pintura es a veces un grito, pero en otras ocasiones se vuelve l¨ªrica y amable, como una forma de terapia de las contradicciones que lleva uno dentro.
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