El Gobierno chino intensifica la presi¨®n sobre la secta Falun Gong
El Ej¨¦rcito refuerza su presencia en el centro de Pek¨ªn
El Gobierno chino sigue su campa?a contra la secta Falun Gong. Tras prohibir el jueves todas sus actividades, en los ¨²ltimos dos d¨ªas ha requisado su material de promoci¨®n y ha impedido el desplazamiento de sus miembros desde provincias hacia Pek¨ªn. Las autoridades est¨¢n en alerta y, en las estaciones de tren, los agentes impiden el viaje a la capital a todos los seguidores de la secta. Desde Nueva York, Li Hongzhi, l¨ªder de Falun Gong, reiter¨® que a su grupo no le interesa la pol¨ªtica.
La seguridad en el centro de Pek¨ªn se intensific¨® ayer ante el temor del Gobierno a nuevas manifestaciones. El complejo de viviendas y oficinas de Zhongnanhai -donde viven y trabajan la mayor¨ªa de funcionarios del Gobierno- apareci¨® ayer rodeado de un fuerte cord¨®n policial. All¨ª comenzaron los problemas con Falun Gong, el pasado 25 de abril, cuando m¨¢s de 10.000 seguidores de la organizaci¨®n se concentraron para pedir reconocimiento oficial y el cese del acoso de la polic¨ªa. Esta reuni¨®n supuso la concentraci¨®n m¨¢s numerosa desde los sangrientos incidentes de la plaza de Tiananmen, hace 10 a?os. Las autoridades tambi¨¦n han reforzado la seguridad en esta plaza, donde se encuentra la sede de la Asamblea Nacional Popular (ANP).Frente al edificio de la ANP, la polic¨ªa detuvo el viernes a 200 miembros de la secta. Hasta ahora se estima en m¨¢s de 30.000 las detenciones realizadas. En las calles de Shanghai, las autoridades se incautaron en al menos 50 almacenes de documentaci¨®n de la secta. Tambi¨¦n intervinieron carteles e insignias a vendedores callejeros. La televisi¨®n oficial china ha emitido en varias ocasiones, durante los ¨²ltimos d¨ªas, un documental de m¨¢s de una hora contra las actividades del grupo.
Creado hace s¨®lo siete a?os por Li Hongzhi, de 48 a?os y ex funcionario chino, el movimiento Falun Gong hab¨ªa sido tolerado hasta ahora por el Gobierno. De hecho, muchos altos funcionarios pertenec¨ªan al grupo y segu¨ªan sus pr¨¢cticas y ense?anzas. Hongzhi se autoexili¨® en Estados Unidos hace casi dos a?os, cuando las autoridades chinas prohibieron sus libros y dejaron ver que recibir¨ªan con agrado su marcha del pa¨ªs. En los ¨²ltimos d¨ªas, Hongzhi ha mostrado su temor a ser extraditado a China, donde podr¨ªa ser condenado a pena de muerte.
Los seguidores de Falun Gong definen su filosof¨ªa como "un avanzado sistema de desarrollo personal" que incluye elementos del tao¨ªsmo, el budismo y una t¨¦cnica de relajaci¨®n y meditaci¨®n milenaria en el pa¨ªs llamada qi gong. Esta t¨¦cnica, implantada desde hace siglos en el pa¨ªs, explica la f¨¢cil expansi¨®n de esta cuasi religi¨®n en la poblaci¨®n china. Aunque las autoridades no admiten m¨¢s de dos millones de adeptos en el pa¨ªs, otras estimaciones cifran los seguidores en 70 millones en China y 30 en el resto del mundo.
Dentro del pa¨ªs, Falun Gong cuenta con 39 centros de formaci¨®n, m¨¢s de 1.900 escuelas y 28.000 puntos de pr¨¢ctica. Sin embargo, Hongzhi, en un mensaje difundido tras la prohibici¨®n de Falun Gong, no admite tener ninguna infraestructura. Seg¨²n ¨¦l, todas las actividades las desarrollan voluntarios, y ninguno de esos centros y escuelas pertenece a la organizaci¨®n como tal. Aunque la secta no admite directamente dinero, la venta de los libros y cintas de v¨ªdeo de su l¨ªder, de cojines de meditaci¨®n y de cuadros de Hongzhi le reportan millones de d¨®lares.
Seg¨²n un diplom¨¢tico europeo en Pek¨ªn, la secta posee "una organizaci¨®n nacional bien estructurada, con una r¨¢pida capacidad de movilizaci¨®n", y no ha dudado en hacer todo lo que pueda para molestar al Gobierno chino. Hongzhi neg¨® intencionalidad pol¨ªtica en su organizaci¨®n y consider¨® que los cargos contra ellos eran un "invento" del Gobierno.
El sistema de conexi¨®n de los miembros de la secta es virtual: decenas de p¨¢ginas web, todas ellas con otros tantos enlaces a otros sitios relacionados con el asunto, ponen en contacto a los miembros dispersos por todo el mundo. En estos d¨ªas, los miembros de la organizaci¨®n muestran en Internet datos y testimonios de las detenciones de sus miembros.
Li Hongzhi empez¨® a estudiar filosof¨ªa a final de los a?os ochenta, cuando tambi¨¦n descubri¨® la pr¨¢ctica del qi gong. Ha publicado m¨¢s de diez libros, traducidos a varios idiomas y disponibles, por supuesto, en Internet.
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