Fiel al esp¨ªritu original
Victorio Macho fallece en el a?o 1966, sin descendencia, y dona la mayor parte de su obra a la ciudad de Toledo. El museo se mantiene abierto espor¨¢dicamente desde 1967 hasta 1984. Y, mediante un convenio firmado en 1996 entre la Fundaci¨®n Victorio Macho y la Real Fundaci¨®n de Toledo, ¨¦sta se hace cargo de la rehabilitaci¨®n, que dura dos a?os.La reconstrucci¨®n de lo que fue casa y taller de Victorio Macho, ubicada en la zona de museos de Toledo, se mantiene fiel al esp¨ªritu original. Conserva los tres edificios de ladrillo (de macizo de era) cara vista, piedra, madera y teja ¨¢rabe y tres jardines que albergan varias esculturas de Macho.
Siguiendo su esp¨ªritu, se han plantado algunos de los ¨¢rboles m¨¢s caracter¨ªsticos de Toledo (granado, cipr¨¦s, magnolio) y jardiner¨ªa t¨ªpica de conventos y claustros (tomillo, lavanda, salvia y santolina).
El arquitecto encargado de la rehabilitaci¨®n, Manuel de las Casas, desvela c¨®mo tuvo que ser especialmente cuidadoso con los espacios originales.
La casa, con magn¨ªficas vistas sobre el Tajo y los cigarrales, albergaba varios cub¨ªculos peque?os y oscuros que hoy han desaparecido dando paso a unos espacios luminosos y di¨¢fanos.
En esos rincones, seg¨²n De las Casas, Macho se encerraba para retirarse de tanta belleza, para pensar y trabajar. Como Le Corbusier, recuerda el arquitecto, que proyectaba sus edificios metido en un cubil de color gris.
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