El rey de Marruecos confirma que ahondar¨¢ la transici¨®n iniciada por su padre, Hassan II

Marruecos seguir¨¢ adelante con su transici¨®n. El rey Mohamed VI, de 35 a?os, confirm¨® el viernes por la noche que continuar¨¢ y ahondar¨¢ la experiencia democratizadora emprendida por su padre, Hassan II, en los ¨²ltimos meses de sus 38 a?os de reinado. Una semana despu¨¦s del fallecimiento de su padre, el nuevo monarca pronunci¨® su primer discurso del trono ante las c¨¢maras de televisi¨®n. Manifest¨® su "total apoyo" al primer ministro, el socialista Abderram¨¢n Yussufi, que encarna la esperanza del cambio. Fue el ¨²nico pol¨ªtico al que nombr¨® en su intervenci¨®n de 15 minutos.

El jefe de Estado franc¨¦s, Jacques Chirac; el ex presidente de la Comisi¨®n Europea, Jacques Delors, y el secretario general de la ONU, Kofi Annan, vaticinaron el pasado fin de semana que el pr¨ªncipe heredero de Marruecos iba a ser "capaz de fortalecer la democracia". Unos d¨ªas despu¨¦s, su primer discurso parece indicar que ¨¦sas son sus intenciones. Lejos de ser meramente protocolario -dedicado a agradecer las muestras de dolor por la muerte del rey-, el monarca sorprendi¨® al comprometerse p¨²blicamente con las reformas en curso. No s¨®lo dio un espaldarazo a Yussufi, de 75 a?os, sino que expres¨® su "apego (...) a la monarqu¨ªa constitucional, al pluralismo pol¨ªtico, al liberalismo econ¨®mico, as¨ª como a los derechos humanos y a la protecci¨®n de los derechos individuales y colectivos en el marco de la seguridad". Precis¨® que su papel consistir¨¢ en "asesorar y, en su caso, arbitrar", dando as¨ª a entender que su protagonismo ser¨¢ menor que el de su padre. Sus palabras son un est¨ªmulo para que Yussufi siga adelante con la transici¨®n que emprendi¨® hace 16 meses al frente de un heterog¨¦neo Gobierno de coalici¨®n integrado por 41 ministros y secretarios de Estado. La apertura estaba, sin embargo, estancada a causa de la resistencia del majzen, la nebulosa de cortesanos y altos funcionarios que quieren perpetuar el antiguo r¨¦gimen. Preocupaci¨®n social Mohamed VI confirm¨®, adem¨¢s, su preocupaci¨®n por las "capas m¨¢s pobres" de la sociedad. "Nos esforzaremos", recalc¨®, "por aligerar el peso de la pobreza" en la que est¨¢ inmersa la gran mayor¨ªa de la poblaci¨®n. Otorg¨® tambi¨¦n prioridad a la reforma de la educaci¨®n, actualmente inadaptada a las necesidades del mercado laboral. "Acordamos gran importancia a este proyecto para vencer el paro (...)" que padece el 21% de la poblaci¨®n urbana marroqu¨ª. Como es tradici¨®n cuando un nuevo monarca accede al trono, Mohamed VI anunci¨® tambi¨¦n una gracia real, que abarca a 46.212 presos, una cifra r¨¦cord. El 17% (7.988) empez¨® ayer mismo a ser liberado mientras que la condena de los dem¨¢s ser¨¢ recortada. Miles de marroqu¨ªes se agolparon ayer ante las puertas de las prisiones confiados en que sus familiares estar¨ªan entre los agraciados. El segundo canal de la televisi¨®n marroqu¨ª (2M) emiti¨® ayer tambi¨¦n, por primera vez, im¨¢genes de reos saliendo de una c¨¢rcel, la de Ukacha.Asignatura argelina

Argelia es la primera asignatura pendiente de la pol¨ªtica exterior marroqu¨ª. Su presidente, Abdelaziz Buteflika, que sigui¨® junto al rey el entierro de Hassan II, es, dijo Mohamed VI, "nuestro gran amigo". La normalizaci¨®n de las relaciones entre ambos pa¨ªses -la frontera terrestre permanece cerrada- es inminente. Esta amistad no obsta para que el monarca d¨¦ por hecho que el refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n del S¨¢hara "se llevar¨¢ a t¨¦rmino". Prevista para julio pr¨®ximo, la consulta ser¨¢ "confirmativa de la marroquinidad del territorio", seg¨²n el rey.