La oposici¨®n un¨¢nime al arbitraje hace inviable para Exteriores la consulta al Consejo de Estado

La oposici¨®n un¨¢nime de los juristas y de todas las fuerzas pol¨ªticas espa?olas a un arbitraje amistoso entre Chile y Espa?a en el caso Pinochet pr¨¢cticamente descarta que el Gobierno espa?ol realice la consulta al Consejo de Estado que hab¨ªa barajado para atender la creciente presi¨®n del chileno, empe?ado en su demanda de jurisdicci¨®n.Fuentes de Asuntos Exteriores indicaron ayer que la entrevista que el ministro Abel Matutes mantuvo el viernes pasado con el l¨ªder del PSOE, Joaqu¨ªn Almunia, ten¨ªa por objeto informarle de la situaci¨®n de las relaciones con Chile y de las pretensiones del Ejecutivo de Eduardo Frei y, a la vez, sondear el criterio de los socialistas respecto a una eventual consulta al Consejo de Estado sobre la posibilidad de un arbitraje bilateral. Precisamente, el Gobierno espa?ol ya hab¨ªa explicado al chileno que la v¨ªa del arbitraje, que tiene solicitada desde el 23 de abril acogi¨¦ndose a la Convenci¨®n contra la Tortura, exigir¨ªa una medida previa con rango de ley y, por tanto, una tramitaci¨®n parlamentaria.

La ausencia de apoyos pol¨ªticos a un arbitraje, la falta de tiempo para tramitar la ley en el tramo final de la legislatura y, sobre todo, la alergia mostrada por el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar a convertir el caso Pinochet en un debate pol¨ªtico interno -con las elecciones generales en puertas- hac¨ªan totalmente inviable para Madrid la propuesta de Santiago.

Sin embargo, el empecinamiento del Ejecutivo de Frei y la presi¨®n de los sectores m¨¢s derechistas que, seg¨²n otras fuentes, han realizado veladas amenazas contra las inversiones espa?olas en Chile -Endesa y Telef¨®nica son los buques insignia del capital espa?ol en ese pa¨ªs- decidi¨® al Gobierno a estudiar la posibilidad de consultar al Consejo de Estado a fin de tener mayores argumentos jur¨ªdicos en sus negociaciones diplom¨¢ticas, se?alaron fuentes de Exteriores.

El Gobierno espa?ol, al mismo tiempo que ha mostrado su permanente "solidaridad" y "comprensi¨®n" con el proceso de transici¨®n chileno y las dificultades que a Frei le supone el caso Pinochet, ha actuado sin dilaci¨®n de ning¨²n tipo en la tramitaci¨®n de la extradici¨®n del general golpista, lo que ha irritado profundamente en Santiago.

La tormenta pol¨ªtica desatada en Espa?a por la eventualidad de una consulta al Consejo de Estado, interpretada por algunos como un primer paso para aceptar el arbitraje, tendr¨ªa para la diplomacia espa?ola una parte "positiva": demostrar a Frei que el Gobierno espa?ol no tiene margen jurid¨ªco ni pol¨ªtico para actuar en el caso Pinochet.

Por otra parte, la Oficina de Informaci¨®n Diplom¨¢tica, en una nota oficial, desminti¨® ayer "formal y en¨¦rgicamente la existencia de contactos o negociaciones de tipo secreto entre ambos gobiernos respecto a un eventual arbitraje o cualquier otra cuesti¨®n". Y es que, en este caso, el di¨¢logo diplom¨¢tico se ha hecho con una inusitada publicidad, cruce de cartas incluido: Abel Matutes, el 11 de julio, en el diario chileno El Mercurio; su hom¨®logo chileno, Juan Gabriel Vald¨¦s, el 23 del mismo mes, en un escrito p¨²blico. Incluso hay quien piensa que el canciller chileno, con la suya, airada, estaba mirando m¨¢s a los militares de su propio pa¨ªs que a los diplom¨¢ticos espa?oles.