Llamadas y pasquines amenazantes

"V¨¢monos a Marbella a hablar con el jefe y solucionar juntos esta situaci¨®n". ?sta fue la frase que le espet¨® el candidato del GIL, Antonio Sampietro, al cabeza de lista del Partido Democr¨¢tico y Social de Ceuta (PDS), Mustafa Mizzian, a los tres d¨ªas justos de celebrarse los comicios municipales del 13 de junio. ?sa fue la demostraci¨®n m¨¢s contundente de una constante persecuci¨®n telef¨®nica que tanto ¨¦l como los otros dos parlamentarios del partido musulm¨¢n, Mohamed Chaib y Abdel Hakim Abdelsalam, padecieron desde que el GIL no obtuvo la mayor¨ªa absoluta. Seg¨²n afirmaron ayer, los tres diputados del PDS fueron objeto de numerosos intentos de contacto por parte de Sampietro y los otros diputados de su formaci¨®n. Las presiones sobre estos tres diputados no se limitaron s¨®lo a una sucesi¨®n interminable de llamadas telef¨®nicas sino tambi¨¦n a otras de tinte m¨¢s desagradable.Las calles de Ceuta han amanecido algunos d¨ªas sembradas de pasquines amenazadores contra ellos. Los parlamentarios musulmanes aseguraron que en ning¨²n momento contemplaron la posibilidad de pactar con los hombres del GIL por considerarlo "un partido con claros tintes racistas". ?sta fue una de las razones que motivaron a Mustafa Mizzian a colgarle el tel¨¦fono con quejas destempladas a Sampietro cuando le propuso viajar hasta Marbella.