UPN monopoliza las bodas

En el Ayuntamiento de Pamplona s¨®lo casa UPN. La alcaldesa de la capital navarra, la regionalista Yolanda Barcina, ha decidido que las bodas civiles que se realizan en la casa consistorial sean oficiadas desde ahora s¨®lo por corporativos de su propio grupo y se ha negado a delegar esa facultad en ning¨²n otro partido. Euskal Herritarrok (EH), segunda fuerza pol¨ªtica de Pamplona en los comicios del pasado 13 de junio, hab¨ªa pedido a la primera edil que delegase tambi¨¦n esa capacidad en al menos un concejal de cada grupo. Casarse civilmente en el zagu¨¢n de la hermosa casa consistorial de Pamplona es una costumbre habitual para muchas j¨®venes y no tan j¨®venes parejas que deciden sellar su amor ante uno de los concejales de la capital en un ambiente bastante m¨¢s agradable que la fr¨ªa sala de un juzgado. Pero lo que hasta el pasado 13 de junio era una facultad delegada por el anterior alcalde, el convergente Javier Chourraut, en corporativos de los tres partidos que formaban su equipo de gobierno municipal (CDN, PSN-PSOE e IU), se ha convertido desde las elecciones locales en una facultad reservada ¨²nicamente a los concejales de la conservadora UPN. Si a muchas parejas no les importa qui¨¦n les case, a otras s¨ª. Y ah¨ª es donde han surgido algunos problemas. Petici¨®n de Zabaleta El portavoz de Euskal Herritarrok en el consistorio pamplon¨¦s, Patxi Zabaleta, se dirigi¨® a Yolanda Barcina a finales del pasado julio para pedirle que ampliara esa facultad a, al menos, un concejal de cada uno de los grupos de la oposici¨®n. Zabaleta argumentaba su petici¨®n en el que hecho de que "cualquier persona de Iru?a pueda ver celebrado su matrimonio con la persona m¨¢s af¨ªn ideol¨®gica, sociol¨®gica o sentimentalmente y, adem¨¢s, que dicho matrimonio se pueda celebrar en euskera". Para entonces, la primera edil ya hab¨ªa decidido delegar esta facultad ¨²nicamente en los seis concejales -UPN cuenta con doce corporativos- de su grupo que forman la comisi¨®n de gobierno del Ayuntamiento: Jos¨¦ Ignacio Labiano, Mar¨ªa Kutz, Jos¨¦ Luis D¨ªez, Vicente Etayo, Juan Luis S¨¢nchez de Muni¨¢in y Eradio Ezpeleta. En nadie m¨¢s. Para argumentar su petici¨®n, Euskal Herritarrok a?ad¨ªa que su grupo hab¨ªa recibido ya varias peticiones de parejas que deseaban que las casase alg¨²n edil abertzale. No obstante, la alcaldesa respondi¨® negativamente a la petici¨®n. En el intercambio epistolar entre ambos grupos, Barcina se refiri¨® a la ley 35/1994 de 23 de diciembre, el texto regulador de las competencias de la alcald¨ªa para autorizar matrimonios y delegar en los concejales como facultad discrecional y, por tanto, "no reglada en forma vinculante". De esta forma, y tras explicar que no consideraba procedente "ampliar las delegaciones ya acordadas", la alcaldesa aduc¨ªa en defensa de su postura que el actual n¨²mero de concejales autorizados a celebrar bodas duplica el que exist¨ªa en la anterior corporaci¨®n. Lo cierto es que los concejales de UPN est¨¢n ya celebrando bodas los s¨¢bados por la ma?ana en el zagu¨¢n municipal, de forma rotatoria, desde su acceso al cargo. "Muchas de las parejas que solicitan casarse civilmente en el Ayuntamiento no hacen cuesti¨®n de qui¨¦n les vaya a casar", indica una fuente municipal, "aunque s¨ª es cierto que siempre ha habido parejas que han solicitado que les casara un determinado concejal o incluso que no les casara gente de ciertas tendencias pol¨ªticas y, en general, no ha habido problemas para ello", a?ade la misma fuente. "Hay parejas j¨®venes que, ante la perspectiva de que les casara un concejal de UPN, han optado por casarse en el juzgado", explica Patxi Zabaleta, "porque la opci¨®n del Ayuntamiento la vinculaban a la relaci¨®n personal o de afinidad con determinados concejales. Al ser imposible su participaci¨®n, ese matrimonio no se ha podido realizar en la forma deseada", a?ade el portavoz de la marca electoral de Herri Batasuna.