Un ret¨¦n de 300 personas vigila los rescoldos para que no se reaviven

El fuego, oficialmente, se dio por controlado a las siete y media de la tarde de ayer. Pero tres horas despu¨¦s, las brasas a¨²n ard¨ªan en el monte. Para vigilarlas y evitar que las llamas se reavivaran, un ret¨¦n formado por 300 personas, entre dotaciones de bomberos y personas especialmente contratadas en el verano por la consejer¨ªa, ten¨ªa previsto quedarse toda la noche en la ladera del monte Abantos. Adem¨¢s de las personas, el ret¨¦n contaba con una veintena de coches todoterreno, algunos de ellos provistos con autobombas para arrojar agua.Entre los que ten¨ªan previsto vigilar toda la noche se encontraba una cuadrilla de bomberos de San Sebasti¨¢n de los Reyes, que hab¨ªan llegado al monte a las seis de la ma?ana del s¨¢bado y que hab¨ªan trabajado hasta las cinco de la tarde. "En el bosque quemado, ahora, hay muchas brasas y tocones de ¨¢rboles que a¨²n sueltan llamas. Para apagar cada uno de estos tocones es necesario echar 300 litros de agua", comentaba David, uno de estos bomberos de San Sebasti¨¢n de los Reyes.

Los vecinos de la zona, al llegar la noche, y a pesar de que el incendio estaba extinguido, a¨²n ve¨ªan, de lejos, el resplandor rojizo que emit¨ªan las brasas y los rescoldos del suelo.