Servicios Sociales abrir¨¢ dos centros para delincuentes de 16 a 18 a?os para ajustarse a la futura ley penal del menor

La futura Ley de Responsabilidad Penal del Menor, que eleva a los 18 a?os la edad m¨ªnima para cumplir condena en la c¨¢rcel y que est¨¢ tramit¨¢ndose en el Congreso de los Diputados, obligar¨¢ a la Comunidad de Madrid a abrir dos nuevos centros de reclusi¨®n y reeducaci¨®n, uno cerrado y otro semiabierto, para los delincuentes de 16 y 17 a?os. El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, del PP, explic¨® ayer, durante una visita al centro de acogida de menores de Hortaleza, que en esta legislatura su Gobierno destinar¨¢ 1.200 millones de pesetas para construir ambos recintos. En la actualidad hay en Madrid tres centros de la Comunidad para internar a chavales de 13 a 16 a?os que cometen delitos: El Madro?o, de primera acogida; Altamira, con 20 plazas en r¨¦gimen semiabierto, y Renasco, cerrado y con 10 plazas. Pero no todos los chicos implicados en fechor¨ªas acaban en ellos porque a muchos se les imponen medidas alternativas a la reclusi¨®n para paliar el da?o causado. As¨ª, el a?o pasado s¨®lo se impusieron castigos que supon¨ªan la privaci¨®n de libertad a 150 menores infractores, frente a otros 1.100 a los que se les aplicaron otras medidas cautelares (por ejemplo, reparar destrozos). Los nuevos centros previstos son necesarios para no mezclar en los que ya existen a chicos de 13 a 16 a?os con otros de m¨¢s edad que precisan un tratamiento diferente. En ellos ingresar¨¢n j¨®venes de 16 a 21 a?os porque la futura ley se aplicar¨¢ tambi¨¦n a autores de delitos no violentos de m¨¢s de 18 a?os a los que, por su inmadurez, los jueces prefieren internar en centros de menores que en presidios de adultos. La pena m¨¢s dura que se podr¨¢ aplicar a los j¨®venes de 16 a 18 a?os que cometan delitos de extrema gravedad ser¨¢ de cinco a?os de internamiento seguidos de otros cinco de libertad vigilada. A los infractores de 16 a 18 a?os, como a los menores de esa edad, se les podr¨¢ tambi¨¦n imponer alternativas a la reclusi¨®n: servicios en beneficio de la comunidad, tratamiento ambulatorio (por ejemplo, si es toxic¨®mano), convivencia con familia o grupo educativo y privaci¨®n del permiso de conducir. El Gobierno regional tiene tambi¨¦n previsto abrir en estos cuatro a?os un centro para menores con problemas de salud mental, otro para ni?os discapacitados y un tercero para adolescentes conflictivos pero que no han cometido delito alguno.